LIGA ENDESA | R. MADRID 70 - HERBALIFE 57
Bourousis y Ayón acaban con el Granca tras el descanso
El griego anotó 14 puntos y el mexicano atrapó 13 rebotes. Gran defensa del Madrid en un tercer cuarto que se cerró con un parcial de 16-2. Rudy no jugó.
Cinco fichajes, poca pretemporada y muchos kilómetros aún por delante para rodarse. Todo cierto, pero en tres partidos, el de este debut liguero y los dos de la Supercopa, ya se aprecia algo. El bólido blanco tiene este año marchas, no va siempre en séptima con el pedal a fondo. Mira a cada curva, pero también a la meta, al final de la carrera. Sube y reduce a conveniencia, esta vez con Rudy detrás del banquillo, reservado con molestias musculares en la pierna derecha. Forzar sería absurdo. El resultado no varió mucho. Triunfo amplio (70-57) y último cuarto cómodo.
El Herbalife Gran Canaria de Aíto jugó una muy buena primera parte, con el base Tomás Bellas (en la agenda blanca la pasada campaña) a un nivel magnífico. Defensa, control del juego y también puntos, tiro. Pero llegó el descanso y luego el tercer cuarto, y ahí colapsó el equipo amarillo. ¿Motivo? Varios, empezando por la amenaza rival y siguiendo por la cuarta falta del gigante Tavares (2,20 m) en el minuto 21. Hasta entonces taponaba alguna vez e intimidaba siempre. A Mejri; a Bourousis y Ayón, a los dos a la vez. Se sentó y el Granca tuvo una crisis de fe severísima. Dejó de hacer pupa en el rebote (21-9 sólo en ese parcial). Y pasó de anotar con fluidez (38-43 al intermedio y una máxima de 32-39) a no ver ni el tablero. Sólo dos puntos, una canasta de Kendall en todo el periodo cuando ya pensaban que les habían puesto una tapa invisible al aro.
Jugó Llull de escolta pero dando asistencias (6), Sergio de base titular y Campazzo 15 minutos de suplente, concienciado atrás y genial en el show. Primer partido en casa del argentino y ya se ganó a la grada. Es bajito, sí; pero posee algo. El mayor cambio en el juego, sin embargo, llegó con el brinco anotador que dieron los pívots (Nocioni actuó unos minutos de alero emparejado con O’Leary). Hay debate, y es seguro que con Nocioni de ala-pívot (sólo él, ni Reyes ni Ayón tienen esa amenaza en el tiro) el Madrid genera más espacios. Pero esta vez con Ayón y Bourousis (buena racha ofensiva de Mejri en el segundo parcial) reventaron al Granca. El mexicano, incluso acoplándose, sumó 10 puntos y 13 rebotes. Una bestia. Y Bourousis mostró pies de bailarín al poste (14 tantos y 22 de valoración). Más allá de ensanchar o no la pista con su colocación en ataque, cerraron el espacio aéreo blanco. Enorme solidez defensiva, demasiado para el Granca, incluso para Aíto en esta ocasión. Día uno, queda toda la Liga.