Liga Endesa | Barcelona - Real Madrid
Xavi Pascual dice que estará vigilante con los árbitros
La final en el Palau, que hoy sí se llenará (19:15, La 1 y TV3). El Barcelona ha recuperado el factor cancha (1-1). El Madrid debe ganar un partido fuera para forzar el quinto.
Los duelos se suceden, pero sin caer en la rutina. Ahora es el turno del Palau. Cada partido ha sido distinto al anterior, con nuevos alicientes y protagonistas. Se esperaba a Mirotic y surgieron Nachbar y luego Mejri (1-1). Laso habló del arbitraje y... vimos un segundo encuentro de guante blanco.
“Dijimos lo que sentíamos —explicaba ayer Sergio—, no queríamos calentar la final. De hecho, nunca afirmamos que los árbitros ayudaran al Barça ni que perdiéramos el primer partido por este motivo. Sólo nos quejamos del trato”. El base no cree que aquellas críticas se vuelvan ahora en contra del Madrid, con un Palau más encendido de lo habitual: “Habrá un gran ambiente, pero ya ganamos allí hace un año”.
El rejonazo lo dio esta vez Xavi Pascual: “Acusaban al Barça de tener algo que ver con las designaciones. Lo que dijeron es que la ACB y su estamento arbitral es manipulable. No sé hacia dónde tirará la ACB, pero puedo decir que no tenemos nada que ver con las designaciones”. Y añadió: “Nunca sabremos si los árbitros se sintieron condicionados en el segundo partido. Optamos por no convertir esta final en un circo. Pero estaré pendiente”.
En lo deportivo, equipos al completo, que no a pleno rendimiento. “Nos acercamos a los 80 encuentros y las fuerzas son las que son”, dice Pascual. En el Barça no hay lesionados y en el Madrid, Rudy Fernández (molestias en el tobillo derecho) jugará. Draper reapareció el sábado, aunque anda para pocos trotes. ¿Y Pablo Laso? El técnico dirigirá con la normalidad que se le puede pedir a alguien operado 48 horas antes (el domingo) del tendón de Aquiles. Sentadito en la silla.
Defensa y rebote como pilares para construir el ataque. Con Mirotic bajo de confianza, Mejri ha sido la figura emergente. La aparición del tunecino, secundado por Bourousis, ha dado pujanza al juego interior blanco. Fuerza para contrarrestar a Tomic. Mejri es un jugador diferente, un gigante veloz que llega más alto que nadie y cambia tiros: “Sí, estoy en mi mejor momento desde que llegué al Madrid. Ha sido una temporada dura como quinto pívot; pero, como me decía Hugo López (segundo técnico), en mi año de rookie debía esperar mi ocasión”. ¿Repetirá en el tercero?