Oliver lidera la reacción del Granca y fuerza el tercer duelo

El Herbalife Gran Canaria nunca se rinde. Ni a pesar de jugar contra un Unicaja que le supera en presupuesto, ni por un marcador adverso, ni por una situación física al límite. Los insulares, cuando peor lo tenían, sacaron su habitual espíritu de guerreros para doblegar a los de Joan Plaza por 63-62 y forzar el tercer partido de la eliminatoria.

Tuvieron los canarios que darle la vuelta a la tortilla, porque en un partido áspero y muy poco lucido fueron los andaluces los que arrancaron, dentro de la igualdad, ofreciendo mejores sensaciones. Con Vázquez y Toolson ayudando, Caner-Medley tomó protagonismo para que su equipo terminara el primer cuarto con la mínima renta (12-13).

Con Ben Hansbrough incluido saliendo de una gastroenteritis, Pedro Martínez tuvo de nuevo solo ocho jugadores para rotar, y la capacidad atlética de los costasoleños empezó a notarse, especialmente la de su base, Jayson Granger. El uruguayo anotó, dirigió y mandó, y aunque con mucho trabajo, el Unicaja amplió las diferencias (23-30, min. 19) hasta amenazar con romper el choque. Esa ventaja, pese un triple de Eulis Báez, la mantuvo el cuadro visitante, que se fue al descanso con el 29-36 y un sentimiento creciente de estar ante una gran oportunidad para cerrar la serie.

Sin saber muy bien cómo, el Granca cambió la energía del partido en la reanudación. Aunque solo momentáneamente, aparecieron en ataque hombres como Nacho Martín o Hansbrough, que con algunos puntos mantuvieron vivos al equipo local. Pero no era suficiente, y Granger, fino y cargado de confianza, callaba cada reacción del Gran Canaria Arena con un nuevo triple. El 33-42 y luego el 36-45 se antojaban como una losa insalvable, pero el Herbalife tiene la suerte de contar con un tipo que juega muy bien al baloncesto, un señor llamado Albert Oliver.

Desde la casta y el talento, Oliver se cargó a los suyos a la espalda y les hizo llegar con más aire al final del tercer cuarto (44-48) y comenzar el último con una tendencia alcista. Cada canasta era ya un parto, en cualquier zona, y los valientes salían al frente. Granger prácticamente solo en el Unicaja, y Tavares y Bellas apoyando al gran Oliver. A punto de llegar al último minuto, una bella suspensión de Ryan Toolson colocó el 61-62, pero Bellas estuvo afinado desde el 4,60 cuando tuvo que estarlo y volteó el tanteo hasta el 62-63. Un doble tiempo muerto consumió Plaza para intentar aprovechar los tres segundos que le quedaron a su equipo, pero la defensa canaria se aplicó y el tiro lejano de Fran Vázquez se fue al aro.

Triunfo grancanario para alagar la serie, que mañana decidirá el rival del Madrid en semis. El Unicaja llega más entero, el Granca muy mermado. El Martín Carpena empujará a los suyos, los isleños jugarán con la presión de su rival, como ya hiciera el curso pasado en el Buesa Arena.