Si había un partido que los Nueva York Knicks, con Phil Jackson en un palco de honor del Staples Center, necesitaban ganar de cara a seguir en la lucha por estar en la fase final era el que esta noche disputaron ante los diezmados Lakers.

Pero ocurrió todo lo contrario, los Lakers, a pesar de las ausencias de todos sus titulares, jugaron sin el escolta Kobe Bryant (rodilla), el ala-pívot español Pau Gasol (vértigo) y el base canadiense Steve Nash (espalda), surgieron con el mejor baloncesto ofensivo y ganaron a los Knicks por paliza de 127-96, que se complican sus aspiraciones para entrar en los playoffs.

El alero Xavier Henry se convirtió en el líder sorpresa del ataque de los Lakers al conseguir 22 puntos que le permitieron encabezar una lista de cinco jugadores que tuvieron números de dos dígitos.

Otros dos jugadores, Nick Young y Kent Bazemore aportaron 20 y 18 puntos, respectivamente, con una combinación entre los tres jugadores de 10 triples, de los 18 que consiguieron los Lakers y que fue también otro de los factores claves.

El escolta Jodie Meeks fue el mejor titular al conseguir 14 puntos, incluidos cuatro triples de siete intentos, recuperó cuatro balones y repartió tres asistencias.

Mientras que el pívot Chris Kaman, que salió de titular en el puesto de Gasol, consiguió 13 puntos, nueve rebotes y tres asistencias que lo dejaron como el mejor en las acciones bajo los aros.

El base Kendall Marshall se encargó de dirigir el juego y repartió nueve asistencias y encestó siete puntos, incluido un triple, mientras que el ala-pivote Ryan Kelly logró nueve tantos, ocho rebotes y dos recuperaciones de balón.

Como equipo los Lakers tuvieron un 58 % (48-83) de acierto en los tiros de campo y el 64 % (18-28) de triples, comparados al 49 % (36-74) y 27 % (4-15), respectivamente, de los Knicks, que también perdieron el duelo bajo los aros al capturar 32 rebotes por 38 de los angelinos.

Carmelo Anthony aportó 29 puntos, nueve rebotes y tres asistencias, que lo dejaron una vez más como el líder de los Knicks, pero su aportación individual no fue suficiente a la hora de evitar la segunda derrota consecutiva después de haber tenido ocho triunfos seguidos.

El escolta Tim Hardaway Jr. logro 17 puntos, el ala-pivote Amar'e Stoudemire llegó a los 16, mientras que el pívot Tyson Chandler y el escolta-alero J.R. Smith anotaron 12 tantos cada uno.

La derrota dejó a los Knicks con marca de 29-42, novenos en la Conferencia Este, a tres partidos de los Atlanta Hawks (31-38), que ocupan el octavo, último lugar que permite jugar la fase final.

Jackson volvió al Staples Center como nuevo presidente de los Knicks y vio el partido en un palco de honor, donde fue acompañado en la segunda parte por el exjugador de los Knicks y de los Lakers, Metta World Peace.

El partido comenzó de forma arrolladora por parte de los Knicks que tuvieron parcial de 8-0 y 14-22 al concluir el primer cuarto, pero cuando se fueron al descanso eran los Lakers los que estaban arriba en el marcador (50-42).

El equipo angelino encontró en Henry al jugador clave del ataque que desbordó a la pobre defensa de los Knicks y lograron parcial de 36-20, que cambió el rumbo del partido y le abrió a los Lakers el camino del triunfo.

Nada cambió en el tercer periodo, todo lo contrario, el ataque de saque rápido y transición de los Lakers que dirigió Marshall fue arrollador y consiguieron el mejor parcial en lo que va de temporada y de la franquicia al anotar 51 puntos.

El cuarto periodo fue un puro trámite y los Lakers (24-46) se aseguraron la segunda victoria consecutiva, primera vez que lo logran en tres semanas, pero que los deja en el penúltimo puesto de la Conferencia Oeste.

Su gran compensación fue conseguir la victoria ante Jackson, el exentrenador del equipo, que ahora tiene como misión conseguir la reconstrucción de los Knicks en la búsqueda de un título de liga, algo que consiguió por cinco veces con los Lakers y otras seis más con los Chicago Bulls.