Durant arrasa en el reencuentro de Westbrook y Beverley

Después de dos derrotas muy poco edificantes, encajando 128 puntos de los Suns y 114 de los Lakers, los Thunder volvieron a su pista y se impusieron a los Rockets, el mejor equipo del Oeste en lo que va de 2014… al menos hasta que se han puesto a funcionar de nuevo a pleno rendimiento los Spurs. El partido tenía miga: no sólo por el regreso de Harden a OKC, siempre una noticia, sino por los ecos del último duelo entre ambos equipos, el 16 de enero: ganaron los Thunder 92-104 y los Rockets jugaron uno de los partidos más ciclotímicos de la historia: 73 puntos en el primer tiempo, 19 en el segundo.

En aquel encuentro, Durant anotó 36 puntos. Esta vez, 42. La ametralladora de los Thunder lleva esta temporada 11 partidos de 40 puntos o más. Ningún otro jugador de la liga lleva más de cinco. Pero hay más: Durant ha puesto su récord en 29 partidos seguidos con más de 25 puntos, la segunda vez que lo consigue y una cifra que no ha alcanzado nadie más en los últimos 25 años. Todavía le quedan once partidos para igualar a Michael Jordan, que dejó la racha en 40 partidos en la temporada 1986/87.

En los Rockets no estuvo mal Harden pero sí Howard, al que se le atragantan los Thunder. En la presente temporada lleva tres partidos de más de 25 minutos con menos de diez puntos y dos de ellos han sido ante los de Scott Brooks. La dureza y la energía física en defensa del rookie Steven Adams le dio la noche a Howard en un duelo en el que se reencontraban también Beverley y Westbrook después de que el base de los Rockets lesionara al de los Thunder en los pasados playoffs. Westbrook fue de menos a más para terminar con 24 puntos, 7 asistencias y 4 robos.

El reencuentro no fue agradable y entre los dos bases ya se ha creado una rivalidad que seguirá dando que hablar. Beverley repitió la acción, una falta cuando Westbrook se dirigía hacia la banda para un tiempo muerto, que en los pasados playoffs obligó al de los Thunder a pasar de nuevo por el quirófano. A la acción le siguió una tangana que amenazó con sacar del partido a un Westbrook que después se rehizo y acabó mostrando su mejor versión en el triunfo de su equipo, que abre la brecha con los Rockets otra vez a tres partidos y sigue a uno de los Spurs en la lucha por la cabeza en el Oeste.