Howard vuelve a Orlando para finiquitar a los Magic

Dwight Howard regresaba a Orlando y allí no se olvidan de él, aunque para mal. Volvía el hijo pródigo (8 años en la franquicia de Florida) y los que antes le vitoreaban, dos años después, le abucheaban. "El año pasado fue más especial porque me encontré con un montón de caras conocidas. En este sólo quería llegar a Orlando y ganar", decía Superman, que consiguió su objetivo. Con él, los Rockets dominaron el juego interior (58 puntos en la pintura para Houston frente a los 26 de Orlando) y sería con sus puntos en el tercer cuarto (11 con 5 de 6 en tiros), cuando la franquicia tejana pusiera tierra de por medio: del 48-41 al 65-75 y Orlando nunca bajó de la barrera de los ocho puntos. "Es decepcionante porque empezamos muy bien, pero en el tercer cuarto nos desinflamos", se lamentaba Tobias Harris, cuyo equipo no pudo contar con Jameer Nelson y Victor Oladipo (el único que había jugado hasta este partido todos los encuentros de Orlando).

El mejor de Houston fue James Harden, que anotó 31 puntos (11 de 19 en tiros de campo) y repartió seis asistencias. Howard firmó dobles-dígitos: 19 puntos y 14 rebotes. También firmó en Orlando dobles figuras el montenegrino Nikola Vucevic: 15 puntos y 10 rebotes.