Poeta hace una rima perfecta para ganar el derbi vasco

No se recuerda en los últimos tiempos la irrupción en ACB de un jugador con tanta incidencia en el juego en su estreno. Poeta es desde ya una sorpresa mayúscula. Cuando el Baskonia estaba atascado, sacó su fusil el base italiano e hizo estallar todo el scouting del Gipuzkoa Basket. Se sabía que Giuseppe, de 28 años y 1,90 metros, rescindió el pasado mes de noviembre su contrato con el Virtus, donde jugaba desde el año 2010. Aún tenía dos temporadas más de contrato con el equipo de Bolonia y a lo largo de estos dos meses haba descartado otras ofertas de equipos de la Lega de Italia para terminar aceptando la propuesta del Buesa Arena.

Formado en el equipo de Prima Veroli, llegó a la máxima categoría italiana en la temporada 2006 al fichar por el Teramo de la Lega, donde estuvo hasta el curso 2010 y fichar por la Virtus. Pues bien, en 17 minutos justificó su fichaje por el Baskonia. El derbi vasco de Illumbe fue magnífico, pleno de emoción, con una penetración en el último suspiro de Robinson, con dos abajo, tras atravesar casi toda la pista; por no usar la izquierda, una bandeja sencillísima (fue empujado en falta) no se acomodó en la cesta. La Copa se acerca a Vitoria tras otra victoria ajustada (como ante Obradoiro y Barcelona) y se aleja de San Sebastián. En los resultados de hoy, el Joventut también se arrima y distancia a Bilbao.

El GBC marcó al inicio un ritmo excesivo para un Baskonia petrificado, con la lengua fuera tras ceder ante el Panathinaikos en la Euroliga días atrás. Doblas no fallaba un tiro, se merendó la pintura vitoriana y dejó en mala posición a un Pleiss que desde luego es un gran proyecto de jugador pero aún no está para ir a la NBA. Pensar en cómo salieron a la Liga norteamericana Splitter, Nocioni o Scola y ver la ternura con la que aún se maneja el alemán aboca a un abismo. El GBC no tenía defensa en frente y se fue al 40-24. Mates, triples, un balón que viajaba en AVE… era un paseo militar.

La segunda parte fue otro mundo. Scariolo leyó la cartilla en el descanso y todo el mundo se implicó. Resultado: su equipo se vino arriba, salió muy enchufado y cabalgó a lomos de Nocioni, su líder. Un 2-17 llevó la contienda al 42-41 y luego salió el chaval Diop para aportar mucho descaro, como de costumbre, y poner al Laboral Kutxa por delante, con dos tiros libres: 48-49 a falta de 11:54. Una zona 2-3 muy activa rompió el ritmo del GBC, al que, esta vez sí, le punteaban los tiros. Poeta demostró para qué se le ha fichado: enseñar la puerta de salida a Hodge y moverse con determinación en el campo. Jelínek no participó de la fiesta y también parece no contar. Cuando el derbi subía de temperatura, Pepe Poeta anotó una bandeja complicada, un triple bien cuadrado y otra canasta de dos. Ahí empezó su matinal heroica. Hanga dio frescura física y cogió un rebote ofensivo en las bombillas. Todo ello dio seguridad a los alaveses.

La cuarta personal de Doblas condicionó el desarrollo final. Scariolo ganó la partida a Sito. Apostó por los pequeños Poeta, Heurtel, Causeur, Saneme, Nocioni para volver loco a Doblas y cerrar a los tiradores azules. Todos jugaban abiertos y crearon desajustes claves. Chapu cayó eliminado en el tramo final y Poeta embocó triples para el 71-75 a falta de 1:08. Doblas falló una bandeja sencilla (ese es David, capaz de errar lo más fácil y anotar lo inverosímil) y en el otro lado Heurtel demostraba que los pequeños se atragantaban al enemigo. Poeta fue despreciado y emergió estelar. El caso es que en la lotería de triples, el propio director italiano erró dos muy importantes y Robinson tuvo la opción de ir a la prórroga. Poeta resuelve una cuestión vital en el Laboral Kutxa: contar con un elemento más en la toma de decisiones en pista, limitada hasta ahora al imprevisible Heurtel y un saturado Nocioni. Hubo un homenaje a los cadetes de la Selección de Euskadi por sendas platas en el Campeonato de España.