LAKERS 85 - SPURS 91
Parker echa por la borda el buen trabajo de los Lakers de Gasol
Parker, aprovechando su manifiesta superioridad sobre Nash, echó por la borda el buen trabajo colectivo de unos Lakers donde destacó Pau Gasol, con 20 puntos y 11 rebotes.
El base francés Tony Parker, aprovechando su manifiesta superioridad sobre Steve Nash y manejando con mano maestra el ataque tejano, echó por la borda el buen trabajo colectivo de Los Angeles Lakers y lideró la victoria de los San Antonio Spurs por 85-91 en el Staples Center.
Parker concluyó con 24 puntos y 6 asistencias, mientras que el argentino Manu Ginóbili aportó 20 tantos. Por parte de los locales destacaron Pau Gasol, con 20 puntos y 11 rebotes, y Jodie Meeks, con 14 tantos.
Fue el primer duelo entre Lakers y Spurs sin Kobe Bryant ni Tim Duncan desde el 22 de noviembre de 1996. Duncan fue baja por una fuerte contusión en el pecho, producida durante el encuentro del miércoles frente a Memphis.
Aún sin la presencia de Duncan, la primera canasta de los Lakers llegó en forma de triple a cargo de Gasol, aunque su segundo intento, realizado inmediatamente después, no tocó aro. Sin embargo, y haciendo caso a la lógica, no tardaron en llegar los balones interiores al español para que los Lakers arrancaran con buen pie (13-4).
La respuesta tejana llegó de la mano de Kawhi Leonard y un Parker imparable que rompió una y otra vez la cintura de Nash, tan desacertado en defensa como frío en ataque, pero el equipo de Gregg Popovich no lograba despegar por completo debido a su pésimo porcentaje de acierto en el tiro (7/28 al término del primer cuarto).
Los reservas californianos, como ya ocurriera en el debut frente a los Clippers, pisaron el acelerador y con un triple de Jordan Farmar y cinco puntos seguidos de Meeks dieron 15 de ventaja a los de Mike D'Antoni (33-18), aunque de nuevo los Spurs recortaron distancias, esta vez a través de un inspirado Ginóbili y la muñeca de Danny Green.
Las pérdidas de balón, muy controladas por los angelinos durante los primeros 19 minutos, y los fallos en el lanzamiento (5/20 en el segundo cuarto) precipitaron el regreso de los Spurs, culminado con un triple del escolta argentino recién comenzada la segunda parte (42-44).
El encuentro entró en una fase de muchos errores, pero sobre todo de una gran igualdad entre las penetraciones de Parker y el acierto de Steve Blake desde el perímetro, si bien los de Popovich dieron con la senda adecuada apostando por la intensidad y agresividad de Green y Boris Diaw.
Se llegó con 61-63 al último periodo. El equilibrio se mantuvo gracias a la intensidad defensiva local, el titánico esfuerzo de Jordan Hill en el rebote ofensivo y los triples de Wesley Johnson, que contrarrestaron la inspiración de Ginóbili y la claridad de ideas de Parker.
Con 5:46 por jugar y 74-76, Gasol regresó a la pista. Nash permaneció en el banquillo. La balanza siguió inmóvil (80-80, 2:35), pero el mayor control de la situación por parte de los Spurs fue determinante en los últimos compases con una suspensión de Parker, un triple de Diaw y un palmeo de Tiago Splitter.