EUROBASKET FEMENINO
Las campeonas, en AS: "Nunca dudamos de que seríamos oro"
La selección femenina aterrizó en el aeropuerto de Barajas a las 13.55 horas. Posteriormente se desplazarán a la Puerta del Sol para festejar el triunfo.
Con cansancio acumulado, pero con esa sonrisa que no se les ha borrado de la cara desde que subieron a lo más alto del podio el domingo, las internacionales acudieron a la redacción de AS para brindar por un oro que ha costado veinte años conseguir. Una medalla que premia un campeonato inmaculado y a un equipo que se ensambló a las mil maravillas para creer más que nadie en que el título era posible. Ni cuando las francesas se pusieron tres arriba al final del tercer cuarto dejaron de hacerlo. "No dudamos en ningún momento. El oro era nuestro. No dejamos de creer en él", decía Cindy Lima, que abandonó la pista doliéndose de un dedo: "Era sólo para darle más dramatismo".
Siempre con sus medallas, las españolas hicieron un tour que terminó en el AS. "¿Pesan?", preguntaba Tomás Roncero. "Sí, pero con lo que han costado... Seguro que las han hecho así de grandes porque pensaban que iban a ser para ellas", bromeaba Palau. Y lo cierto es que Francia, la gran favorita en su campeonato, la mejor plantilla, se fue decepcionada con una plata que sabe a fracaso. "Un asalto que terminó mal", titulaba L'Équipe en su portada, ilustrándolo con una fotografía del rostro serio de las francesas.
El oro de Orchies fue el final perfecto para un guión que pone el The End a la carrera internacional de Valdemoro y Aguilar. "Se hizo justicia con nosotras. Ni en mis mejores sueños me podría haber imaginado esto, despedirme con un oro", decía la base madrileña. A sus 36 años, y con 18 en la Selección, son las dos jugadoras que han construido el camino para que este equipo se bañara el domingo en oro. "Queríamos regalarles una medalla", decía Silvia Domínguez. "Ellas lo dieron todo por esta selección. Se merecían esto y mucho más", añadía Torrens, que le restaba importancia a su inclusión dentro del quinteto ideal. "Necesitaba un campeonato así tras mi lesión, pero estar en el quinteto es secundario. Lo importante es este oro y seguir trabajando para que haya más".
La próxima cita será el Mundial de Turquía en 2014 y la ambición no desaparece. "España se plantea siempre estar en lo más alto", avisa Xargay. El equipo sigue con hambre.