NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

Liga Endesa | Real Madrid - Barça Regal

La Liga se decide en el Palacio

Esta noche habrá campeón después de 45 jornadas (22:00 horas, La 1 y TV3). Los blancos, favoritos en las apuestas. Los azulgrana, con Navarro lesionado pero dispuesto a forzar.

Actualizado a
Reyes le ha pedido a la afición que el Palacio sea esta noche "un infierno para el Barça". Las entradas se agotaron en cuanto se pusieron a la venta.
Jesús Rubio

No hay quinto malo y el duelo de esta noche (22:00, La 1) quizá sea el mejor de una final apasionante. El Palacio de Deportes dictará sentencia, decidirá el campeón de Liga en la temporada más larga de la historia del baloncesto europeo, en la que los azulgrana afrontan hoy su partido oficial número 81, mientras que para los blancos es el 76, aunque además estuvieron de gira NBA por Memphis y Toronto. Último esfuerzo, todas las marchas engranadas, sin excusas y con Navarro (ya se probó ayer antes de viajar a Madrid, como se ve en la imagen, y pocos dudan de que se vestirá de corto pese a la rotura muscular en la pierna derecha). El triunfo o el fracaso a sólo 40 minutos.

El Madrid es favorito en las apuestas por talento, físico y factor cancha; pero el Barça­ está ahí, como siempre, con su gen competitivo, agazapado, esperando la ocasión para agarrar el tercer título seguido en su séptima final consecutiva. Los jugadores blancos se han quejado por el arbitraje del pasado domingo, consideran que "el numerito montado" por el rival en el primer duelo surtió efecto. Hoy pitarán Arteaga, Conde y Jiménez; valor, suerte, al toro y que se equivoquen lo justo.

Pero bien haríamos todos en mirar más a los jugadores, a la pista, porque son ellos los que ganan y pierden títulos. Y a la grada, que sueña con una noche histórica, con ver de nuevo al Madrid alzar un trofeo en casa, delante de su afición, 20 años después de que Sabonis se subiera a las vallas publicitarias puño en alto para festejar aquella Liga ganada al Joventut en 1993. Ya ha llovido.

De vuelta al presente, esta final se ha jugado al ritmo culé, poca velocidad y mucho cinco contra cinco. Si nada cambia, el rebote y el acierto en el tiro resultarán claves. Los blancos han dominado los rechaces hasta el cuarto partido, en el que naufragaron ante un rival más intenso. Y de los triples, qué decir, el vía crucis del Madrid: 20 de 80, con Rudy en 0 de 16. Mérito de la defensa culé. "Tengo lanzadores fiables y habrá que trabajar para que puedan tirar más solos", dice Laso, que espera una variante táctica en la pizarra de Pascual: "Hará algún cambio, siempre lo ha hecho". El año pasado fue la zona y ahora­... A ver. Qué final.