EL PERFIL
Spanoulis, el Navarro griego, un talismán en la Euroliga
Tras su paso por el Panathinaikos, con el que ganó en 2009 su primera Euroliga, destapó la caja de los truenos en 2010 al fichar por el eterno rival, el Olympiacos.
Vassilis Spanoulis (Larissa, 8-7-82) decidió con 14 años, cuando jugaba en la cantera del Keravnos, que iba a ser jugador de baloncesto. Lo que no sabía El Navarro griego es que no sólo cumpliría su sueño sino que también haría historia. Apodado Kill Bill por su puntería en los momentos más críticos, se ha convertido en un auténtico talismán: ha disputado tres Final Four, que se han resuelto con tres títulos y tres MVP. Sólo un tal Kukoc había conseguido ser el mejor en tres ocasiones. Palabras mayores.
Pero la leyenda de Spanoulis no comenzó en el Olympiacos, sino en su eterno rival, el Panathinaikos. V-Span llegó al PAO en 2005, procedente del Maroussi, aunque su primera aventura en el equipo verde duraría poco. Tras el Mundobasket de Japón, en el que con 22 puntos privó a EE UU de la final, el base puso rumbo a la NBA, a Houston, que recibió de Dallas sus derechos (fue elegido en el puesto 50 del draft en 2004). "Dadle tiempo y será el nuevo Steve Nash", decía su compañero rocket por aquel entonces Yao Ming. Pero la Liga norteamericana fue ingrata con el griego, que estaría de regreso en el Panathinaikos un año después. "Era un sueño para todos aquellos que crecimos con Jordan. Fue una decisión tomada más con el corazón que con la cabeza, aunque no me arrepiento", reconoce Spanoulis.
Lo cierto es que en Europa no le ha ido nada mal. Tras su paso por el Panathinaikos, con el que ganó en 2009 su primera Euroliga, destapó la caja de los truenos en 2010 al fichar por el eterno rival, el Olympiacos. Con él, los Reds, a pesar de haber reducido ostensiblemente su presupuesto, dominan Europa: dos títulos seguidos cuando nadie contaba con ellos. Casado con Olympia Hopsonidou, Miss Grecia en 2006, el base tuvo un bonito gesto el domingo con su rival: fue consolando uno a uno a los jugadores del Real Madrid. Todo un MVP dentro y fuera de las pistas.