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BARCELONA-CAJA LABORAL

El Caja Laboral se la juega ante un Barcelona sin presión

El equipo vitoriano pelea por estar en cuartos sin apenas margen de error. Al Barça sólo le queda sellar un liderato de grupo que ya tiene prácticamente atado.

Cook atiende las instrucciones de Tabak.
RODOLFO MOLINADIARIO AS

En la quinta jornada del Top-16, el 24 de enero, un Barcelona Regal hasta entonces titubeante visitaba a un Caja Laboral en racha tras la llegada de Tabak: 17 victorias seguidas, 4-0 en la segunda fase continental. Pete Mickeal lideró entonces una victoria incontestable del Barça (79-90) que invirtió el camino de los dos equipos. Los vitorianos han marchado desde entonces con más sombras que luces y encadenaron esa y otras cuatro derrotas seguidas en Europa para empinar el camino a cuartos, si bien las últimas victorias ante Besiktas y Fenerbahçe han abierto una última puerta a la esperanza.

Al Barcelona, en cambio, todo le ha ido bien desde entonces. El equipo de Xavi Pascual ha jugado diecinueve partidos y ha ganado dieciocho desde la humillación ante Estudiantes en el Palacio el 13 de enero (88-66). Sólo ha perdido en Liga Endesa, en el Palau… y ante el Caja Laboral. Por el camino ha ganado la Copa, ha recuperado e incluso perfeccionado el libro de estilo y ha sellado el pase a cuartos de una Euroliga en la que suma nueve victorias seguidas. En un grupo en el que el Barcelona se ha escapado (10-1) y Besiktas y Fenerbahçe han dimitido, quedan tres plazas para cinco equipos: Olympiacos, Siena, Khimki, Maccabi y Caja Laboral. Los dos primeros están en 7-4, los otros tres en 6-5. Una caja de cerillas de la que el cuadro vitoriano estará dentro o fuera en función de este partido en el Palau y de su visita al Khimki en la próxima jornada. Termina el Top-16 en casa y ante el Siena.

Para el Barcelona el partido apenas es una cuestión de prestigio y una oportunidad para sellar el sobresaliente en matemáticas: está clasificado, tiene la ventaja de campo hecha y sólo está pendiente de cerrar el primer puesto de grupo con un triunfo, un pinchazo de Siena o una derrota por menos de 19 en su duelo directo en Italia. De paso puede alimentar su excelente salud, vengarse del único equipo que le ha ganado en los últimos dos meses y mantener su extraordinaria racha como local en el Top-16: 23 victorias seguidas, todos los partidos de esta fase disputados en el Palau a partir del 30 de marzo de 2006.

Será el quinto enfrentamiento de la temporada entre catalanes y vascos, un nuevo capítulo de una serie que ha visto la marcha de Ivanovic y la llegada de Tabak, el cambio de bando de Oleson o la salida por la puerta de atrás de Cabezas, clave en el triunfo baskonista en el primer duelo, en Liga Endesa y en Vitoria. Cada equipo hasta ahora ha ganado dos partidos. El Barcelona se ha llevado la caza mayor, el primer duelo en este Top-16 y la semifinal de Copa, ambos partidos en Vitoria. El Caja Laboral se ha impuesto en los dos duelos de Liga. En el último (67-69) no estaba Navarro, que sí jugará esta vez y que disputó su primer partido ACB desde el fichaje de Oleson el pasado fin de semana ante el CAI: 28 puntos.

La inercia es del Barcelona. La necesidad, de un Caja Laboral que viene de ser zarandeado por el Joventut. Tabak trata de equilibrar una plantilla en la que no todos rinden como deberían, o no lo hacen siempre, y en la que se echa de menos estabilidad en la dirección con un Heurtel que todavía no ha ido y un Cook que a veces parece haber vuelto. El Barcelona jugará sin urgencias, el Caja Laboral movido por la obligación: un triunfo en el Palau puede suponer más de medio billete hacia la supervivencia.