GRAN CANARIA 65 - MANRESA 75
El Manresa tumba al Gran Canaria desde el perímetro
El conjunto isleño continúa con su particular bache de resultados tras sumar la tercera derrota consecutiva en la Liga Endesa. El americano Ryan Toolson firmó 25 puntos.
El Básquet Manresa sorprendió al Herbalife Gran Canaria anotándose el triunfo en el CID con un espectacular acierto desde el perímetro que le permite soñar con la permanencia, mientras que el conjunto claretiano continúa con su particular bache de resultados tras sumar la tercera derrota consecutiva en la Liga Endesa (65-75).
De nada sirvieron los 25 puntos firmados por el americano Ryan Toolson, ya que el ejercicio coral de los visitantes dilapidaron toda posibilidad de reacción de los canarios, con hasta 5 jugadores sumando dobles dígitos en ataque.
En un comienzo fulgurante, los manresanos destaparon el tarro de las esencias en el exterior, desactivando la defensa amarilla con un espectacular 60% en triples y sellando en el electrónico un más que contundente 17-27. De poco servían los puntos de Rey y Báez en ese arranque, ya que el casi inmaculado acierto de Yanev y Arco desquiciaron al plantel insular, que seguían sin encontrar alternativas.
Sin embargo, en el segundo cuarto empezaron a resentirse las muñecas del equipo catalán, mientras el americano Ryan Toolson conseguía minimizar la hemorragia anotadora con un parcial de 12-2 (36-37) y 13 puntos en su hoja de servicios. En cualquier caso, la entrada de Ramsdell y Hanga permitió al Manresa mantener la manija del encuentro hasta el descanso con un balsámico 38-41.
En la reanudación, los amarillos volvieron a sacar la casta con Toolson y Beirán como protagonistas ofensivos, consiguiendo ponerse en vanguardia incluso en el ecuador del tercer periodo (57-55). Pero de poco sirvió para los insulares, ya que la situación volvió a tornarse a favor de los manresanos, que con un parcial de 0-17 volvieron a tomar oxígeno (59-71), con Arteaga y Asselin recuperando terreno en la zona y DeVries asumiendo los galones desde el exterior.
En los compases finales, los pupilos de Jaume Ponsarnau jugaron con la ansiedad de los isleños, que ya a la deriva sumaron la tercera derrota consecutiva ante un rival renacido en la competición doméstica.