CELTICS 86 - KNICKS 89
Anthony le ganó el duelo a Garnett en su propio campo
Esta vez no hubo ningún incidente. Anthony sumó 28 puntos, nueve rebotes y tres asistencias, mientras que Garnett hizo 8 puntos y 12 rebotes.
El alero Carmelo Anthony vivió una de las noches más plenas en cuanto a satisfacciones deportivas y personales después de llegar al TD Garden, de Boston, y ayudar a los Knicks de Nueva York a ganar a domicilio (86-89) al equipo local de los Celtics.
La victoria no sólo permitió a los Knicks romper una racha de 11 derrotas seguidas en Boston, sino que también se vengaron de la que sufrieron (96-102) en el Madison Square Garden, el pasado 7 de enero, cuando Anthony, al enfrentarse verbalmente dentro y fuera del campo con el ala-pívot Garnett, le costó un partido de suspensión.
Esta vez no hubo ningún problema ni dentro ni fuera del campo, todo fue deportividad y el sonido de la bocina que puso final a un partido que estuvo siempre competido e igualado en el marcador.
Anthony lideró a los Knicks al conseguir 28 puntos (11-28, 1-6, 5-6), nueve rebotes, tres asistencias y dos recuperaciones de balón, que lo dejaron como líder encestador del partido y muy cerca de establecer una nueva marca de equipo.
El alero estrella de los Knicks llegó a los 27 partidos consecutivos que anotó al menos 20 o más puntos y está a tan sólo dos de empatar la mejor de todos los tiempos, que estableció Richie Guerin (29), en la temporada de 1961-62, y a una de dar alcance al expívot Patrick Ewing (28).
Anthony, que fue abucheado permanentemente por los seguidores de los Celtics, no mostró ningún tipo de hostilidad hace Garnett, y por el contrario en un momento determinado le dio la mano para ayudarlo a levantar del suelo tras una jugada en la que el veterano ala-pívot del equipo de Boston se cayó.
Junto a Anthony, el ala-pívot Amare Stoudemire se convirtió en el sexto hombre de los Knicks al conseguir 14 puntos, nueve rebotes y puso dos tapones, que compensaron la pobre actuación del pívot Tyson Chandler (cinco tantos y ocho balones capturados bajo los aros), la misma noche que fue elegido por los entrenadores de la NBA como reserva del equipo de las estrellas de la Conferencia Este.
El veterano base-escolta Jason Kidd aportó 12 puntos y el escolta Iman Shumpert llegó a los 10 tantos que lo dejaron como el cuarto jugador de los Knicks que tuvieron números de dos dígitos.
Mientras que el base argentino novato Pablo Prigioni jugó 16 minutos en los que aportó seis tantos al anotar 2 de 3 tiros de campo que fueron todos triples, repartió cuatro asistencias y capturó dos rebotes.
Los Knicks (26-16) mantienen el liderato en la División Atlántico al ponerse un juego por delante de los Nets de Brooklyn (26-16) que tuvieron jornada de descanso.
El base Rajon Rondo, que consiguió su cuarto triple doble de la temporada, fue la figura de los Celtics al aportar 23 puntos, 11 asistencias y 10 rebotes, pero no pudo evitar la quinta derrota consecutiva de su equipo, que tiene marca perdedora de 20-22.
El alero Paul Pierce, que perdió el balón en los últimos segundos del partido cuando buscaba intentar un triple que pudiese forzar la prórroga, anotó 22 puntos y capturó seis rebotes.
Garnett, esta vez, tampoco pudo ser factor ganador de los Celtics, al anotar ocho puntos y 12 rebotes, incluidos 11 defensivos, que lo dejaron con la mejor marca del equipo en esa faceta del juego.
El escolta brasileño Leandro Barbosa disputó nueve minutos con los Celtics y se fue en blanco al fallar los tres tiros que hizo a canasta, incluido un intento de triple, y cometió dos faltas personales.
Los Knicks se fueron al descanso con la ventaja parcial de 48-50 y el tercer cuarto lograron racha de 13-6 que les ayudó a estar en control del marcador y forzar a los Celtics a realizar el mayor esfuerzo físico para intentar la remontada que al final no consiguieron.