NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

Baloncesto | Las tablas de Daimiel

Una recta final así de fabulosa te lleva a la Selección

Sergio Rodríguez desapareció de las convocatorias de España en 2007. Cinco años después puede regresar.

Daimiel
Actualizado a
<b>SOBRESALIENTE. </b>Sergio Rodríguez bota defendido por Fran Vázquez.
rodolfo molina

¿Cómo evaluar para la Selección?. Hay gente que pedía con vehemencia a Sada para la Selección el verano pasado, casi siempre con el descarte implícito de Ricky, y ahora está reclamando como fija e indiscutible la convocatoria de Sergio Rodríguez. Se valora, premia y castiga al río por lo que lleva en superficie, no por su caudal. A los jugadores hay que justipreciarlos en relación al estilo de juego de sus equipos, entornos, entrenadores y al rol que puedan tener.

Casi cinco años de ausencia. Sergio, héroe en la semifinal contra Argentina en Japón 2006, desapareció de las convocatorias tras lograr la plata en el Eurobasket del 2007, coincidiendo con la marcha de Pepu. Ni Aíto ni Scariolo han contado con el base y Raúl López, Ricky, Cabezas, Llull y Sada se han unido a la referencia de Calderón. Sergio jugó más de 200 partidos en la NBA sin recibir la consideración de la internacionalidad, todo lo más la invitación oral para una prueba, un workout en el que debía pelear con Cabezas por un puesto para Polonia. Raúl y Ricky eran los otros bases, con Calderón lesionado. Raúl y Cabezas se comprometieron ese año con el Khimki, entrenado por Scariolo.

MVP de los playoffs. Sergio ha metido 18 de 23 triples. Esa cuenta durante nueve partidos, lanzando más de dos por encuentro, es de un impacto descomunal. Una exhibición portentosa que desecha cuestiones sobre el azar o la contingencia. Un playoff fabuloso te lleva a la Selección, como demostraron San Emeterio y Sada. Ahora, sin Ricky, con Navarro y Rudy afectados por lesiones (Llull podría tener más minutos de escolta) veremos si la FEB y Scariolo optan por recuperar a un jugador que ha estado cinco años fuera de su disciplina.