La Copa del Mundo 2014 echa a andar a lo grande

Faltan aún dos años, pero ayer echó a andar el Mundial 2014 en Madrid. Y lo hizo estrenando nombre. "Queríamos darle un toque más joven -anunciaba Patrick Baumann-, y a partir de hoy se llamará Copa del Mundo". Fue la gran novedad en una noche que reunió en el precioso Palacio de Cibeles, sede del Ayuntamiento, al pasado y al futuro del baloncesto español, en una gala presentada por Carlota Reig y Rafa Vidaurreta. Estuvieron todos, desde Sevillano y Paniagua, a los Llorente, Jofresa, Biriukov y alguno que podría estar en esa Selección anfitriona en 2014: Sergio ­Llu­­ll­, Felipe Reyes, Carlos Suárez, Sergio Rodríguez y Nikola Mirotic. Junto a ellos, los exseleccionadores (a excepción de Pepu Hernández, con entrenamiento a esa hora), Sergio Scariolo y autoridades del deporte y la política. Esperanza Aguirre, que ofreció diversas dependencias de la Comunidad (también patrocinadora del Mundial) para alojar el evento, no estuvo entre los asistentes incomodada por el hecho de que se celebrase en el Ayuntamiento. Tampoco acudió Ana Botella, que a las 19:15 dijo inesperadamente que no asistía.

Míticos.

Si estuvieron dos leyendas como Oscar Schmidt y Dino Meneghin. "He vivido grandes momentos en Mundiales. Me quedaría con el del 78 cuando ganamos el bronce contra Italia", comentaba el exinternacional brasileño, que incluso se ofrecía a volver si su selección le necesitaba. Un campeonato que será "para todos", en palabras de Sáez, pero con un toque muy español. Un grupo de baile era el encargado de descubrir el logotipo: dos manos en pose flamenca, que lucía en su peineta una de las bailarinas.

Ayer, la FEB le ponía imagen a un sueño que se convertía en realidad el 23 de mayo de 2009 en Ginebra, cuando Arvydas Sabonis abría un sobre en el que se leía la palabra Spain, derrotando a Italia y China, las otras dos candidatas. Un sueño para toda España, pero especialmente para sus seis sedes: Bilbao, Granada, Las Palmas de Gran Canaria, Sevilla, Barcelona y Madrid, y que tiene el apoyo de todos, incluido David Stern, comisionado de la NBA, que envío un vídeo ofreciendo su respaldo.

Será la segunda vez que España acoja una cita mundialista -la primera fue en 1986- y el jugador más internacional del baloncesto español, Epi, lanzó su reto: "Nuestra ilusión en el 86 era conseguir una medalla. Teníamos un equipo muy bueno, como el de ahora, pero no cumplimos. Mis esperanzas son las mismas que las de todos los españoles. Este equipo es único y espero que se tome la revancha de hace 16 años".