El Unicaja perdió una oportunidad para prácticamente sentenciar la clasificación para la siguiente fase de la Euroliga al perder hoy contra el Spirou Charleroi en un partido en el que remontó en el tercer periodo, pero seis minutos en los que sólo consiguió un punto y un parcial de los belgas de 14-1 en el último periodo sentenció el enfrentamiento.

El equipo malagueño siempre fue por debajo en el marcador en los dos primeros cuartos. El conjunto belga sabía que este partido era su última oportunidad para continuar con opciones, por lo que salió muy mentalizado y convencido de que podía repetir lo de hace una semana contra el Real Madrid.

El primer cuarto hasta la entrada a cancha del pívot inglés del Unicaja Joel Freeland, fue del Charleroi por su intensidad defensiva y porque cometió menos errores que su rival. Hasta el minuto 5 con 14-5, el partido era claro para los locales. Un tiempo muerto y Freeland, valieron para obtener un parcial de 0-8 e igualar el marcador 14-13, minuto 8.

El Unicaja, más fuerte defensivamente, había dejado tres minutos sin anotar a su rival. Esa era la opción para ganar, que no se consumó durante el segundo periodo por la mala selección de tiro, el escaso rebote ofensivo y un conjunto belga mejor posicionado, aunque los tiros libres impidieron que la ventaja fuera mayor. Al descanso: 22-19.

A pesar del resultado, el Unicaja tenía mimbres para luchar por la victoria, ya que cabía la posibilidad de que el Charleroi no aguantara el ritmo impuesto en los veinte primeros minutos. Y así fue. El equipo cajista algo diferente y más acertado logró ponerse por primera vez por delante gracias a Freeland, 48-50, minuto 27.

Ni siquiera una falta del alero Carlos Jiménez y una técnica posterior por protestar intranquilizaron al Unicaja. Terminó el tercer cuarto con ventaja 56-57 y gracias a la efectividad desde el triple, cuatro, del escolta Berni Rodríguez, logró la máxima ventaja 62-66, minuto 33.

El encuentro lo tenía controlado, pero tantos minutos depararían alguna sorpresa. El Charleroi, atascado, resurgió por la indolencia del Unicaja, un punto en seis minutos y un parcial de 14-1 gracias a un excelente base, el estadounidense Demond Mallet, sentenció el encuentro 76-67. Los instantes finales los utilizó el equipo andaluz para maquillar el resultado.