Cuando el Regal Barcelona pierde capacidad de maniobra y entre sus tres bases -Sada, Ricky y Lakovic- sólo son capaces de dar 2 asistencias al resto del equipo, el ritmo de juego se resiente y basta que un sólo base rival, el croata y ex azulgrana Roko Ukic, sea el que marque el ritmo del partido y con su acierto logre más valoración que sus tres pares rivales.

Si a esto se le suma la falta de acierto desde la línea de 6,75 con Lakovic y Navarro logrando una serie desastrosa de 1 de 11, no es de extrañar que un disciplinado Fenerbahçe logre la primera victoria de su historia en el Palau. Y la verdad es que la logró con justicia. Aunque la baja de Basile y las molestias físicas de Morris y Perovic le ayudasen.

El técnico croata Spahija parece que le tiene la medida tomada a Xavi Pascual. ¿Recuerdan del 0-3 en la final de la ACB 2007-2008 con el Baskonia? Pues jugó a eso mismo; a romper el ritmo azulgrana. Su equipo llegó a una máxima ventaja de 9 puntos (18-27) y no permitió a los locales lograr una renta superior a los cuatro (43-39) merced al acierto momentáneo de Lakovic.

Tras la igualada a 57, Tomas y Ukic abrieron una brecha ya inalcanzable para los catalanes (59-65, min. 39). Con Mickeal y Navarro bien frenados ya no hubo reacción posible. Quizás un relevo temporal para Basile pueda romper esta peligrosa dinámica actual.