Valladolid rompe su mala racha tras ganar en casa del Lagun Aro GBC

Eulis Báez ha sido determinante en los inicios, con cuatro canastas casi consecutivas y nueve puntos para él, que han servido para desatascar el juego vallisoletano y meter en problemas a un Lagun Aro que no ha encontrado la vía exterior ni interior para hacer daño a su rival.

Pablo Laso, con un enfado importante, ha exigido actitud a sus jugadores para evitar la debacle vivida en el partido inaugural contra Manresa, y en esta ocasión la reprimenda ha surtido efecto porque los guipuzcoanos han comenzado a mejorar en su juego y remontar poco a poco al conjunto pucelano.

Clave en esta reacción ha sido el juego en la zona rival de Albert Miralles, irregular esta temporada pero un gran desatascador cuando tiene un buen día y así dos canastas consecutivas del pívot catalán han llevado el primer empate casi desde el marcador inicial (41-41).

Lo más complicado estaba hecho para el Lagun Aro, el Valladolid parecía superado por los acontecimientos y le pesaban los brazos, las piernas y también la cabeza con la sombra de la negativa estadística del último mes, con cinco partidos consecutivos perdidos.

Porfi Fisac, técnico visitante, motivó sin embargo a su plantilla para que no arrojara la toalla y nuevamente, con un juego interior poderoso, han vuelto a abrir una mínima brecha de seis puntos que volvía a conceder la iniciativa al conjunto vallisoletano. Los triples de Van Lacke y Chase han sido claves aquí.

Cinco puntos a favor del Valladolid en los últimos cuatro minutos dejaban muy encarrilado el choque pero un último estirón de los donostiarras les ha permitido colocarse a dos puntos (59-61) con un triple del polaco Ignerski, bastante apagado durante el encuentro.

El último minuto ha estado pleno de tensión, se ha llegado a los segundos finales con 67-70 hasta que un triple de Chase ha incrementado la renta a seis puntos para que el Valladolid no tuviera problemas ya para llevarse el partido.