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ACB | A. G. Fuenlabrada 91 - ViveMenorca 80

El sprint de Valters guía la remontada del Fuenla

El ViveMenorca llegó a tener 18 puntos de ventaja

Actualizado a
<b>DE MÁS A MENOS. </b>Eley empezó bien, pero luego perdió gas.
DE MÁS A MENOS. Eley empezó bien, pero luego perdió gas.adrián julián

Huérfanos de Ricky Rubio, que apura su rehabilitación, nos consuela ver a bases con chispa. Kristaps Valters es uno de ellos. Si uno entorna los ojos cree estar viendo a Ricky -ambos viven en torno al 1,90, lucen el nueve y el mismo flequillo- cuando de quien disfrutamos es del letón, que ayer dirigió con mano maestra al Alta Gestión Fuenlabrada frente al ViveMenorca. Con su quinta marcha lideró una galopada en la que Oleson, Blanco y Bueno también contribuyeron. Contribuyeron todos, pues de otra forma no podríamos estar hablando del segundo equipo más anotador de la Liga ACB (el primero es el... ¡Real Madrid!).

Sin embargo, hasta llegar a esa victoria, la tercera del campeonato, los de Luis Guil tuvieron que subir un terraplén que tenía al ViveMenorca 18 puntos arriba (19-37) nada más arrancar el segundo cuarto. "Salimos 15 minutos tarde a la pista", reconoció el entrenador local tras el partido.

Surge Oleson.

Fue entonces cuando Oleson llegó al rescate, sumando de tres en tres, para qué andar con peajes. Tres tiros libres y dos triples consecutivos del escolta de Alaska devolvieron al Fuenla al partido y frenaron en seco a los insulares, donde los Fernández, Marc y Jesús, habían liderado el enorme parcial. Ramos descansaba en el banco y Bueno era mejor-que-bueno y desquiciaba a Eley.

Así, se llegó al descanso con el partido vivo (42-44). Y así, con los insulares noqueados, se reanudó el guión con otro parcial como discurso. El de 15-0 lanzó al Fuenlabrada (del 42-46 al 57-46) y dejó el camino despejado. La trampa del ViveMenorca -Jeter tiró un tiro libre cuando la falta no se la habían hecho a él- le costó caro (técnica a Ricard Casas) y Blanco se unió al aluvión liderado por el juego de Valters. Saúl está de cine y su nombre entra en las quinielas de una Selección donde el que no tiene nombre es el técnico.