"De pequeños, Pau y yo éramos de N'Kono y Lardín"

Marc Gasol

"De pequeños, Pau y yo éramos de N'Kono y Lardín"

"De pequeños, Pau y yo éramos de N'Kono y Lardín"

mariano pozo

Marc Gasol (Sant Boi de Llobregat, 1985) es una de las torres-esperanza de España en el Mundial de Japón. Ayer ganaron a Nueva Zelanda y hoy toca Panamá, ¡rá, rá, rá!

¿Primeras sensaciones japonesas, pollo?

Buenas sensaciones. Por el equipo, que está para lo mejor, y por el ambiente que se respira aquí. ¡La gente de este país es muy educada!

Su primer Mundial y sin esperarlo. ¿Es usted un tipo con suerte?

No me quejo. Pero sí es cierto que no esperaba estar aquí. Cuando Pepu nos llamó a Hernández Sonseca y a mí, tras la lesión de Fran Vázquez, que tanto lamentamos todos, estaba preparando las vacaciones. Mi año no había sido para tirar cohetes precisamente. Había jugado poco en el Barça, mucho menos de lo que esperaba. Todo había sido muy complicado, no sabía siquiera si continuaría en el equipo y el tiempo me dio la razón: mi futuro está en Girona.

Dusko Ivanovic, el entrenador azulgrana, apenas contó con usted la pasada temporada. Se equivoca, claro.

Los yugoslavos son muy tozudos y si no entras en sus planes, mal asunto. Me consolaba pensando que siempre trabajé bien, me esforcé Pero no, Ivanovic no confía en mí.

Cuando termine esta aventura le esperan dos años de cesión en el Akasvayu. ¿Para demostrar qué?

Pues que puedo ser un jugador importante. Tengo toda la ilusión del mundo y voy a un equipo buenísimo. Y con competencia: Bagaric es un excelente número cinco, con pasado NBA.

¿Piensa en volver al Palau Blaugrana con o sin Ivanovic?

No, sólo pienso en mi equipo. El Barça no contó conmigo, es tontería que cuente yo con ellos. Mi presente está en Girona y en la selección, pues pelearé por seguir en ella. Tengo 21 años, ya veremos qué me depara el futuro. Quiero y debo vivir el presente y no es azulgrana.

¿Cuánto le pesa el apellido?

A mí, nada.

¿En serio?

Totalmente. A la gente sí le pesa, pero a mí no, al contrario. Yo estoy orgullosísimo de apellidarme Gasol y de ninguna manera me comparo con Pau.

Dijo usted un día: "Pau es el mejor jugador de la historia del baloncesto español". Eso se traduce en que nadie debe echarle un pulso, empezando por usted. ¿Es así?

No me planteo llegar donde él pues, en efecto, me temo que no lo voy a lograr ni yo ni nadie. ¡Al menos por ahora!

Pau tiene cinco años más que usted. ¿Lo chinchaba de pequeño?

¡Muchísimo! Lo que el hermano mayor al pequeño en todas las familias. Jugábamos al baloncesto y al ping-pong y me ganaba casi siempre ¡y casi siempre me hacía rabiar! Yo me enfadaba mucho porque perdía, ¡ja, ja! En casa hemos sido todos muy competitivos, me imagino que es una cuestión genética.

Sus padres jugaron al baloncesto.

Y nos imprimieron carácter. Mi padre fue un buen ala-pívot y mi madre, una luchadora tremenda: un tanque.

Por eso a usted le llaman la Tanqueta.

Sí, ¡ja, ja! Desde mis tiempos en el Barça B. Cuando esto del baloncesto empezó a ir en serio en mi vida me di cuenta de que por mi estatura y condiciones estaba condenado a pelearme con tíos muy grandes, con muchos kilos. Para sobrevivir ahí había que ser eso, un tanque.

¿Estudia algo ahora?

No, pero confío en hacerlo en Girona. Acabé la selectividad y me gustaría estudiar Periodismo o algo relacionado con el Diseño. Soy de Letras puras.

¿Los periodistas sabemos de baloncesto?

En ciertas ocasiones les interesa sólo vender periódicos.

Interesante.

Hay veces que uno lee según que cosas que ya, ya Pero bueno, en términos generales, sí entienden.

¿Cómo explica Marc Gasol pívot y quién sabe si futuro periodista que la Liga ACB no arrastre viejas pasiones?

Faltan jugadores españoles, gente con cuya presencia se identifique un equipo y a su afición con él.

Varios como Navarro, vamos.

Por ejemplo. O como Epi. Cuando yo era un crío las plantillas de los grandes equipos tenían un par de americanos; ahora las hay con cuatro o cinco españoles nada más. La selección, su nivel, confirma que hay jugadores capaces de jugar a un gran nivel.

Que acaban en la NBA. Mal asunto para los clubes españoles: los mejores acaban marchándose. Su hermano, Calderón, Sergio Rodríguez, Jorge Garbajosa

Pero eso obedece a una selección natural, si la mejor Liga es aquella es normal que los mejores se vayan allí. Pero hay recambio, hay nivel. A la gente le gusta ver jugar a los de casa, si uno se marcha otro ocupará su lugar. Faltan españoles, esa es la cuestión.

¿La NBA llegará a Europa?

Creo que no, pienso que a los americanos no les interesa Europa.

Europeo es Nowitzki, el jefe de Alemania, nuestro gran rival en la primera fase del Mundial.

Ganándoles acabaremos primeros, seguramente. El cruce es la clave.

Si no fallan los demás. En los Juegos de Atenas, España hizo los deberes y los yanquis, no. Nos cruzamos con ellos y nos apartaron de las medallas.

Ese no es un problema nuestro; nuestra obligación es ganarlos a todos con las armas que tenemos y otras que están todavía por descubrir. Yo también considero que ésta es la mejor selección española de todos los tiempos y que éste debe ser nuestro Mundial.

Usted será un hincha de Pepu Hernández, claro.

Me encanta la facilidad que tiene para relacionarse con nosotros. Y le agradezco su confianza, por supuesto. Espero corresponderle con creces.

¿Su abuelo era del Espanyol, verdad?

Verdad.

Y les llevaba a Pau y a usted al viejo estadio de Sarrià.

Era un gran españolista, socio del club y de esos que te contagiaba su pasión. Recuerdo los domingos cuando salíamos desde la Sagrada Familia de Barcelona hacia el estadio. N'Kono y Lardín eran nuestros ídolos; ahora están Tamudo, De la Peña Los seguimos mucho y cuando ganaron la última Copa del Rey lo celebramos de verdad.

¿Quién era más periquito, Pau o usted?

Más o menos.

Pero luego apareció el Barça en sus vidas.

Y aprendimos a quererle. Ahora somos de los pocos que queremos que ganen los dos porque se hace difícil elegir entre el padre y la madre, ¿eh? Es un poco eso La familia, el abuelo sobre todo, nos acercó a uno de los dos clubes y con el tiempo, el deporte nos llevó hasta el otro.

Ustedes tienen un tercer hermano, el pequeño. Adrià se llama. ¿Otro Gasol para el baloncesto?

No, tiene 12 años y mide ya 1.75, pero se limita a hacer deporte. ¡Es el más listo de la familia! Su vocación no parece que vaya a ser el baloncesto; a su edad yo ya estaba en la selección catalana, por ejemplo. Se divierte jugando, nada más.

Oiga, en su casa, ¿cuántas camas habrán comprado?

¡Unas cuantas, ja, ja! Yo heredé la de Pau un día, el pequeño la cambiará pronto Pau y yo crecimos siete centímetros por año desde los 14 hasta los 20. De camas, zapatos y esas cosas, en casa son unos expertos.

Porque comer, comían lo que todo el mundo.

Lo que todo el mundo y ambición, mucha ambición, muchas ganas de superarnos, de hacer las cosas como se deben hacer. Nos gusta el deporte y sabemos que sólo se puede avanzar dedicándonos en cuerpo y alma. La ventaja es que nos encanta, claro. La máxima es jugar y darlo todo, acabar siempre con la conciencia tranquila. Ahora, en el Mundial, y cuando empezábamos.

Citó a Epi. ¿Su ídolo?

¡Qué grande! Se trata de la única persona a la que he pedido un autógrafo en mi vida. Y O'Neill, desde luego. Shaquille es punto y aparte.

Los yankees son el rival, claro.

Sí, son los grandes favoritos.

¿Un podio, veremos en qué orden, puede ser España, Estados Unidos y Argentina? ¿A los argentinos les pasa algo, por cierto? Les hemos ganado dos veces y de paliza.

De estos no te fíes nunca. Cuando más muertos parecen, se levantan y te ganan. Pudimos con ellos, sí, pero verá como desde ahora serán otros. Y sí, ese puede ser un podio, pero no nos olvidemos de Grecia, campeona de Europa el año pasado, y que tiene un equipazo. Esto es un Mundial, aquí estamos todos y muchos en un pañuelo.

¿Y un jugador? ¿Espera la revelación de alguien, la confirmación de alguno?

Navarro jugará un grandísimo Mundial; le he tenido al lado toda la temporada y se que se va a salir.

Otro que podría jugar en la NBA con la gorra.

Juan Carlos tiene nivel de NBA de largo. ¡Y juega con nosotros! Como Jorge (Garbajosa), Calderón, mi hermano, ¡todos!

Ha sido un placer, Marc. Y tiene usted razón: no le pesa el apellido, lo lleva usted bien puesto sobre los hombros. ¡Es usted un tío con toda la barba!

Muchas gracias.

Y mucha suerte.

La vamos a buscar con todas nuestras fuerzas porque estamos aquí para eso.