Pepu: "Nuestro objetivo tiene que ser el oro"

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Pepu: "Nuestro objetivo tiene que ser el oro"

Pepu: "Nuestro objetivo tiene que ser el oro"

JESÚS RUBIO

Aún no se ha estrenado como seleccionador español de baloncesto, pero ya ejerce como tal. José Vicente Hernández, 'Pepu', tiene ideas claras y un entusiasmo que contagia. Su puesta de largo llegará este verano. Preparación y Mundial en Japón (del 19 de agosto al 3 de septiembre), donde España aspirará a superar el cuarto puesto de Cali 82 y, por qué no, al oro.

Vamos a ponernos en situación. Agosto. Mediados. Por la mañana, todavía fresco, confío. Mucho o poco tiempo después del desayuno, según. Entonces, aunque ahora ni siquiera lo sospechen, su mente (sector lúdico o más allá) estará en Japón, concretamente en el Mundial de baloncesto que se disputará allí, España entre las favoritas, Gasol con barba, nosotros con chanclas.

El entrenador de ese equipo que nos irá involucrando hasta atraparnos por completo (siempre ocurre) es uno de los nuestros porque podría ser uno de nosotros. Se llama José Vicente Hernández y es más conocido por Pepu, familiaridad no elegida que acepta con resignación y que sin embargo debería considerar un privilegio porque le acerca a nosotros hasta convertirlo en primo segundo, tío primero o vecino del cuarto, al tiempo que le distingue de otros Josés, Vicentes y Hernández, que los hay a miles y no son familia.

Pepu, relevo de Mario Pesquera en el cargo, fue el protagonista del Foro Ferrándiz-AS, donde expuso su proyecto, sus ideas y, sobre todo, su entusiasmo, altamente contagioso, debo decir. Todo ello ante una ilustre representación del mundo del baloncesto y también ante los alumnos del colegio Jesús Maestro, que son el pueblo joven y soberano. Por cierto, a su derecha, estaba el Padre, Pedro Ferrándiz, que hizo lo que se espera del jefe de la tribu o del padre de la novia: chinchar un poco ("sé que eres madridista...") y luego callar, que es otorgar.

El discurso de apertura de Pepu fue una declaración de intenciones y un alegato en favor del optimismo. "Estoy encantado de cómo me han recibido y quiero devolver esa confianza con intereses. Detecto una ilusión especial, quizá un exceso de expectativas, pero no seré yo quien las frene. Disponemos de una generación extraordinaria de jugadores".

Primera conclusión, acepta el desafío, más sencillo en el grupo de clasificación (Alemania, Panamá, Nueva Zelanda y Angola) y más incierto en los cruces siguientes. "Nuestro objetivo debe ser el oro, aunque a veces se hace cumbre y otras no. Primero hay que clasificarse en el grupo y luego nos tocarán unos cruces importantísimos, contra rivales que aspiran a lo mismo que nosotros. Si te planteas algo menor, tienes menos impulso. La competición nos dirá hasta dónde podemos llegar. En ocasiones equipos que sobre el papel tiene carencias se quieren, se gustan, ganan, vuelven a ganar y acaban por ser campeones. Últimamente ha ocurrido con Argentina o Grecia".

El ejemplo.

Pepu se detiene en Argentina y señala su ardor guerrero y su patriotismo como claves del éxito. "Querían demostrar de lo que eran capaces y estaban animados también por la mala situación de su país. Esas valoraciones ayudan".

La reflexión invita al debate. ¿Carece España de ardor guerrero?. "No he dicho eso, al contrario. Me consta que todos nuestros jugadores sienten que representan a España y algunos incluso duermen con la bandera bajo la almohada".

Sin embargo, hay quien cree que los españoles no tienen capacidad competitiva, a lo que responde el presidente de la Federación, José Luis Sáez. "Ninguna selección del mundo se ha clasificado por méritos deportivos a los últimos grandes torneos. Eso demuestra que somos competitivos".

Y viene la cuestión de la lista, ¿quién irá? ¿Y cómo?. "Cuando tenemos una lista la dificultad es que se transforme en equipo. Hay que conseguir que las grandes personalidades y los grandes talentos se pongan al servicio del equipo. Para lograr nuestro objetivo será necesaria una comunión de voluntades".

Y luego, la concentración. "Voy a tener en cuenta que las concentraciones no sean demasiado largas. Los viajes cargan mucho a un equipo. Necesitamos jugar contra los mejores y he pedido que sea en bloques de tres partidos, que es como disputaremos luego el torneo. Cuando llegue el momento de la verdad, debemos tener hambre de balón".

Saber ganar.

Y no hará mucha falta mentalizar al equipo. "Nuestros jugadores saben que son buenos, la cuestión es que lo puedan demostrar. Para ello, daremos consejos técnicos y tácticos. En la Selección nos quedan muchos pasos que dar. Hay equipos emergentes en otros países y equipos que han aprendido a ganar, como Argentina. Nos falta ese paso, quizá. Estamos en una buena disposición, en un buen sitio para pescar y con la insistencia se puede conseguir. ¿Que cómo se enseña a ganar? A ganar se aprende ganando".

En todo ese reto, la figura de Gasol resulta esencial. "Lo que más me gusta de Gasol es que hace mejores a sus compañeros, es capaz de leer e interpretar el juego y se acerca al ideal. Alguien dijo que quien da una asistencia hace feliz a quien la recibe, al equipo y a sí mismo".

La previsible clasificación de los Memphis de Gasol para los playoff de la NBA, con el consiguiente añadido de partidos, tampoco es un problema para Pepu, ya que "esa experiencia será un bagaje extra para la Selección".

Y algunas pistas sobre los escogidos. "No todos los jugadores por buenos que sean pueden estar en un equipo. Los que están tienen que sentirse los elegidos. Es dificilísimo jugar con siete u ocho. Tenemos que intentar jugar con el máximo, aunque hacerlo con más de diez es difícil. Debe haber un par de ellos para misiones especiales y suficientemente versátiles para aportar otras cosas en un roto o descosido. No sólo se gana por talento, sino también por resistencia e insistencia".

Ya lo leen. Ganar, ganar, ganar, sin paños calientes ni excusas. El mismo objetivo e idéntica ilusión de la que tendremos todos en agosto.

No obstante, hay otros nombres propios en la Selección además del gran Pau Gasol, con el que Pepu reconoce que "ante los demás parecemos más preparados". Estos son algunos.

Raúl López. "Lo que estoy viendo de él es muy esperanzador. Cuando dejas de tocarte la rodilla es que ya sólo piensas en el baloncesto. Raúl tiene talento y personalidad (virtudes esenciales para el seleccionador) y ojalá pueda estar disponible".

Carlos Jiménez. "Ha pasado momentos complicados, pero ya se siente más cómodo. En cierto sentido le ha ocurrido como la primera vez que te dan calabazas, al principio no sabes bien cómo reaccionar, aunque luego te repones. Sé que va a ser capaz mentalmente de estar a punto. Nunca ha dejado de estar al 150%".

Sergio Rodríguez. "Tiene un extraordinario recorrido y muy buena cabeza. No tiene un gran físico, pero ese recorrido lo tiene que pasar, como hicieron otros a su edad. Está pasando un mal momento pero seguro que lo superará".

Y aunque no podrá estar entre los nuestros (sí en el equipo americano), tenía que salir a colación el nombre de Kobe Bryant, 81 puntos ante los Raptors. "Hay mentalidades diferentes y eso explica que no pararan la sangría que les estaba haciendo. Personalmente, prefiero mandar otro mensaje a los jóvenes, el de que pueden llegar a la Selecci ese es un buen objetivo, más cercano que los 81 puntos de Kobe".

También se refirió Pepu a la Copa. "Es díficil decir quién es más fuerte.... Pamesa y Gran Canaria, que podrían parecerlo menos, se están gustando mucho y son peligrosos". Ferrándiz pregunta si le gustaría que ganase el Madrid y Pepu se zafa: "...claro, como cualquier otro equipo que se lo merezca".

Y para acabar, nada mejor que una frase de Juan Manuel Gozalo que merecería un Foro aparte: "En el baloncesto, como el amor, gana quien más veces pasa por el aro".