
Davide Ancelotti ha demostrado ser cualquier cosa menos un Nepo Baby. Conoce su lugar, jamás pierde las formas y transmite entusiasmo por el oficio.
Lunin se merece jugar contra el Bayern. Y Courtois se merece llegar siendo una opción.
Si se presentase el mismísimo Cruyff, quedaría tercero por no ser lo suficiente ‘cruyffista’.
¿Qué será de Rodrygo si además de Vinicius acaba llegando Mbappé? ¿Saldrá en verano?
Nunca conviene infravalorar el poder de la venganza para conseguir objetivos.
No sé cuántas veces he podido ver ya el vídeo del último minuto de Mestalla...
En Vallecas una vela salió por otra. Modric quiere jugar más porque, en fin, por algo es Modric. Y toda Turquía quiere ver a Güler, el prodicio turco.
“Mandé el balón hasta el Cormorán de puritita presión. Me sentí como Roberto Baggio en Pasadena”
Página6
















