Venden una cámara de fotos por 14 millones de euros
El ejemplar de Leica del inventor Oskar Barnack, subastada en Viena, fue una de las primeras cámaras de 35 mm jamás fabricadas en el mundo.
Una cámara de fotos ha batido todos los récords al ser subastada por un total de 14,4 millones de euros. No se trata de un ejemplar cualquiera ya que la cámara en cuestión pertenece a la marca Leica, concretamente, al lote de prototipos ‘0 Series’ y del modelo ‘Leica 0-Series No 105′.
Esta cámara fotográfica perteneció a Oskar Barnack, inventor de la fotografía de 35 mm. De hecho, el modelo es una de las primeras cámaras de 35 mm jamás fabricadas en el mundo. La puja, realizada en la Leitz Photographica Auction de Viena (Austria), comenzó a partir del millón de euros. Esta cámara de fotos se diseñó a principios del siglo XX, cuando la compañía Leitz Camera estaba presidida por Ernst Leitz.
Durante la década de 1920, se fabricaron hasta 23 ejemplares del prototipo ‘0 Series’, de las cuales algunas de ellas todavía existen. La cantidad por la que fue subastada supera con creces al último registro de otra cámara fotográfica de la misma serie, y que fue subastada por 2,4 millones de euros. De hecho, la cámara subastada por más de 14 millones guarda una historia peculiar con respecto a su poseedor, Oskar Barnack, uno de los principales revolucionarios de la fotografía.
El fotógrafo alemán, que trabajó en la empresa Leitz como ingeniero, padecía de asma, por lo que propuso reducir tanto el tamaño, como el peso de las cámaras fotográficas, con el objetivo de realizar fotografías en los exteriores. En los años previos a la Primera Guerra Mundial, Barnack diseñó otro tipo de cámara fotográfica, el modelo conocido como Liliput, un modelo pionero en lo que se refiere a las cámaras de fotos, y que fue el precursor de la futura Leica.
La cámara subastada conserva muy bien su aspecto original, pese a su antigüedad. Con respecto a sus características, es de color negro y contaba con una tapa de lente de cuero original, así como una tapa de aluminio posterior grabada con las iniciales de Oskar Barnack. También se encuentra la cámara Neteller que Barnack usó para investigaciones fotográficas.
Usada por Barnack hasta el año 1930
La cámara subastada por 14,4 millones de euros fue usada por Oscar Barnack hasta el año 1930, cuando se la regaló a su hijo Conrad. A partir de ese año, el fotógrafo alemán comenzó a usar una Leica I Model C con lentes intercambiables. De este modo, se trata de la cámara fotográfica más cara de la historia, después de la subasta realizada en la capital austriaca.