Suiza choca con la Unión Europea: España, uno de los bloqueados

Desde 1815, Suiza cuenta con la neutralidad perpetua. Es decir, se ha comprometido a no participar en ningún conflicto a cambio de que no se libren más guerras dentro de su territorio. Este acuerdo histórico, que concedieron al país helvético en el Congreso de Viena a principios del siglo XIX, continúa vigente en nuestros días y contempla que tampoco se puede enviar material bélico suizo a terceros. Sin embargo, Bruselas está tratando de que lo rompa con motivo de la guerra de Ucrania.

Con el paso del conflicto entre Kiev y Moscú la presión de los socios europeos ha ido en aumento. Pero el Gobierno suizo se mantiene firme en su posición y ha insistido este viernes que no va a permitir que se transfiera armamento de fabricación suiza a terceros países. Así lo han explicado las autoridades, que han destacado que esta posición “se basa en el compromiso con el derecho internacional humanitario, los Convenios de Ginebra y la mediación para alcanzar la paz”.

En cualquier caso, han precisado que su tradición de neutralidad “no equivale a la indiferencia hacia la agresión de Rusia contra Ucrania”, han dicho. Y han aprovechado para insistir que esta agresión ha sido condenada por su parte “repetida y enérgicamente, exigiendo el cese de las hostilidades y la retirada de las tropas rusas de todo el territorio” ucraniano. Y, por ello, Suiza se ha comprometido a seguir de cerca los distintos debates que surjan en el seno de sus instituciones y ha abierto la posibilidad a una nueva declaración al respecto “si fuera necesario”.

España, Dinamarca y Alemania

A pesar de que el país helvético se ha unido a todas las sanciones que ha propuesto la Unión Europa, han sido tres de sus socios los que le han pedido romper este principio de neutralidad. Según ha informado Suiza, se trata de Alemania, Dinamarca y España. Y, por ello, ha recordado también este viernes que lleva aplicando su política de neutralidad desde el comienzo del conflicto ruso-ucraniano, en 2012.

“Las exportaciones de armas también se rigen por la legislación suiza (...) que establece que no se autorizarán (...) si el país de destino está involucrado en un conflicto armado interno o internacional. Este es el caso de Ucrania y Rusia”, ha explicado el Gobierno suizo en un comunicado. Y, “desde el 23 de noviembre de noviembre de 2022 existe un embargo general de armas a Ucrania y Rusia”, han continuado. En cualquier caso, “el suministro de material bélico a empresas de defensa europeas sigue siendo posible porque no violan la ley de neutralidad”, ha apostillado.

De hecho, a mediados del mes de febrero, Suiza se amparó en su neutralidad y bloqueó a España el envío de dos cañones antiaéreos de fabricación helvética a Ucrania. El Ministerio de Defensa había solicitado al Gobierno suizo a mediados de enero la autorización para enviar este material armamentístico a Ucrania, pero se topó con un ‘no’ por respuesta, una decisión que desde el departamento que dirige la ministra Margarita Robles acataron y respetaron.

Colabora con la OTAN y es miembro de la ONU

A pesar de esta política, Suiza ha optado por una política exterior de cooperación con la OTAN y Europa. En el caso de la Alianza Atlántica, lo hace a nivel militar, pero si resulta atacada, perdería este neutralidad. Y, desde 2002, forma parte de la Organización de Naciones Unidas, por lo tanto, cuando la ONU ejecuta alguna sanción, Suiza se une a la misma también. Sin embargo, en este caso, desde el país helvético defienden que está organización no es una alianza de corte militar.