El Sorteo Extraordinario de Navidad, también conocido como Lotería de Navidad, es uno de los sorteos de lotería más importantes y populares que se celebra en España cada 22 de diciembre. Una vez los agraciados celebren su buena suerte, deben cambiar sus décimos o participaciones por el dinero premiado. En cualquier caso, Hacienda siempre se lleva una parte de esa cuantía, por ello es conveniente tener en cuenta cuáles son las bases para tributar la Lotería de Navidad.

Son muchos las personas que deciden compartir el premio con familiares y amigos. Para entender los impuestos que pagas por un décimo es necesario conocer que Hacienda retiene automáticamente el 20% de la parte del premio que supere el mínimo exento de 40.000 euros por papeleta, por lo que solo mantienen la obligación de tributar ‘El Gordo’ y los segundos y terceros premios.

¿Qué hacer?

Es decir, si el premio es de 45.000 euros, la base imponible sería de 5.000 euros y el 20% a abonar serían 1.000 euros. La fiscalidad de los décimos compartidos no es diferente a la de cualquier otro décimo. En el caso de que el premio sea compartido, el importe a recibir se divide entre todos, al igual que el importe a tributar, pero si la persona agraciada decide compartirlo con familiares o allegados, tendrá que ejecutar una donación, que cuenta con otro tipo de gravamen ante la Agencia Tributaria.

El aspecto más importante a la hora de tributar un boleto repartido es hacer constar que la papeleta en cuestión se está jugando entre dos o más personas. De esta manera, no existirán problemas a la hora del reparto. Para poder hacer efectivo el pago del premio, todas las entidades financieras tienen que reconocer a los titulares del décimo ganador, así que todos los afortunados deben acudir al banco para identificarse.

Caso práctico

Un caso práctico será más fácil para entender todos estos conceptos. Si los ganadores han sido agraciados con ‘El Gordo’, estos se podrán repartir los primeros 40.000 euros sin pagar impuestos y los 360.000 restantes tributarán al 20%. De esta forma, los premiados recibirán 328.000 euros a repartir entre las diferentes partes.

Sin embargo, este no sería el dinero que les llega a su cuenta, debido a que Hacienda se ocupa de restar directamente los impuestos que hay que pagar por el décimo compartido a cada uno de los afortunados. No obstante cuando solo una persona cobra todo el premio el resto de miembros que comparten el décimo premiado deben justificar la procedencia de ese dinero.

Varía según la comunidad autónoma

Por su parte, Hacienda puede: asumir que el dinero es del décimo premiado, deducir que se trata de una donación, por lo tanto, quien recibe el dinero tendrá que pagar en el Impuesto de Sucesiones y Donaciones o escrutar es dinero como una ganancia patrimonial.

En caso de que un padre, por ejemplo, quiera compartir el premio del ‘Gordo’ con sus hijos tendrá que hacerlo a través de la fórmula de la donación, lo que implica que cada parte tendrá que tributar de forma diferente. Los hijos que en este caso hayan recibido el dinero a través de una donación deberán pagar el Impuesto de Sucesiones y Donaciones, importe que varía según la comunidad autónoma a la que se pertenezca, y solo podrán hacerlo en un tiempo de 30 días hábiles desde la fecha de la donación.