El truco para saber si la nata de un roscón es artificial o hecha a mano
La nata se elabora con leche de vaca y azúcar, en el momento en que se utilizan aceites y grasas hidrogenadas se convierte en un “mix de grasas vegetales”.
Apenas unos días antes de la celebración del día de Reyes, las pastelerías se llenan de numerosas personas que comparten un mismo objetivo: encontrar los mejores roscones. Característicos por su fruta escarchada y su relleno de mazapán, estos postres se han convertido en una de las más fieles tradiciones en todos los hogares españoles durante estas fiestas navideñas.
Hay quienes lo prefieren sin relleno y hay otros que disfrutan de un interior recubierto de nata y/o chocolate. No obstante, la calidad de los ingredientes depende de dónde se cocine este postre, ya sea en una pastelería artesanal o en una cadena de producción, por ejemplo. Concretamente en el caso de la nata, hay veces que se emplea una artificial con el objetivo de reducir costes y aumentar su producción, pero también hay quienes dedican más tiempo al producto y utilizan una nata hecha a mano.
¿Cómo diferenciarlas?
Según explica el Ministerio de Consumo, una práctica muy común en la elaboración de los roscones es sustituir la nata del relleno por un “mix de grasas vegetales”. Es decir, en vez de ser nata hecha a partir de leche de vaca, es una recreación artificial de este producto hecho con “aceites de palma y coco mezclados con grasas hidrogenadas”.
Para aquellos que buscan el roscón perfecto elaborado puramente con nata, Consumo aconseja que deben revisar la etiqueta antes de comprarlo. En los ingredientes del relleno debe aparecer únicamente la “nata”, que se mostrará en forma de porcentaje. A su vez, se deberá observar si esta ha sido elaborada o no con leche de vaca.
Desde el organismo explican que la nata puede llevar también azúcar, conservantes, estabilizantes y otros aditivos. Pero que en el momento en que contenga alguna grasa vegetal o algún aceite, ya no se considera nata como tal.
No obstante, si el consumidor todavía no tiene clara la procedencia de la nata porque el etiquetado no es del todo claro, siempre le quedará acudir a una pastelería artesanal de confianza o elaborar un roscón de Reyes casero. Además, desde la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) animan a consumir estos postres artesanales porque tienen más calidad que aquellos que se venden en supermercados.