AEMET avisa la llegada del ‘otoño meteorológico’: los lugares a los que afectará

La última semana de agosto se ha disfrazado de octubre sin paseos cubiertos por hojas marrones. El verano había empezado entre lluvias, devolviendo las nubes aquello que no soltaron en abril. Después no tardarían en saludar hasta cinco olas de calor que han barrido cualquier síntoma fresco sobre la faz de la península. Y ahora el calor asfixiante se torna frío inusual, nada severo y casi placentero, intercalado con agua por una vaguada que adelanta el otoño.

Una borrasca bautizada como Rea abrirá las puertas de un episodio de fuertes vientos y tormentas a Baleares, siendo especialmente dura en el norte de Italia. Mientras tanto, un anticiclón cruza la península hacia el oeste. Así el cielo, coincidiendo con la llegada del otoño meteorológico y sin reportar todavía grandes cambios, los termómetros empezarán a bajar hasta cifras que, según detalla la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), serán más frías de lo normal para esta época del año.

Lluvias y tormentas en el tercio norte

“Habrá un ascenso térmico durante los primeros días, pero podría volver a refrescar de cara al fin de semana”, inicia AEMET la previsión a través de redes sociales. Entonces entra en materia líquida: “las precipitaciones se extenderán a otros puntos del norte y este de la península y a Baleares. Durante los últimos días de la semana, aun con incertidumbre, es posible que llueva en amplias zonas del país”. Es sólo el principio.

Según detalla la agencia, el tiempo inestable continuará en el extremo norte peninsular, volviéndose los cielos nubosos y registrando altas cotas de lluvia. Especialmente el norte gallego y la zona cantábrica. En el resto del tercio norte tampoco se descartan chubascos ocasionales. El dato que refleja bien este hecho es el pronóstico de acumulaciones, que marca valores por encima de los 30 litros por metro cuadrado en gran parte de estas regiones. Estas lluvias no llegarían, tal y como destapa la AEMET, al interior y al sur peninsular más allá de ciertas tormentas, aisladas todas, en la vertiente mediterránea.

Descensos acusados antes de la incertidumbre

Donde más se notará el otoño meteorológico será en el mercurio. Es cierto que las mínimas podrían aumentar en el interior noroeste y en el extremo suroeste de la península; pero no ocurrirá lo mismo en otras muchas partes del país. La otra cara de la moneda se vivirá en el Levante, en el norte de Cataluña y en las islas Canarias, lugares donde la temperatura registrará descensos acusados. En el resto peninsular, poco cambio.

En números: las mínimas se mantendrán por encima de los 25ºC únicamente en algunas zonas de la costa del sureste peninsular y en Baleares, siendo estos los lugares que mayor caída experimentarán. Y tan solo en el valle del Guadalquivir se llegará a la franja de los 32-34ºC. El viernes entrará con fuerza una nueva vaguada, provocando la locura de los meteorólogos y la incertidumbre en las predicciones. En algo parecen coincidir. Será frío.