NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

SALUD

¿Qué pasa si no duermes ocho horas?

Sin un descanso de calidad, será muy difícil tener buena concentración y que afrontar la jornada no sólo con la energía necesaria sino también con alegría.

A man sleeps on a motorcycle under the trees in central Hanoi on August 9, 2022. (Photo by Nhac NGUYEN / AFP) (Photo by NHAC NGUYEN/AFP via Getty Images)
NHAC NGUYENGetty

Cada cuerpo tiene un ritmo, cada uno necesita dormir unas horas. Y no es lo mismo cuando somos adultos, adolescentes, niños, bebés o muy mayores. Las horas de sueño varían.

La media para buen descanso se ha cifrado en ocho horas de sueño, y es un dato casi de mínimos. Lo difícil es conseguirlo. La privación de sueño es una tortura, y no dormir lo es también. Por eso vamos a darte datos para que intentes descansar siempre que puedas.

Qué le pasa a tu cuerpo si no duermes

Es un hecho que sin un descanso de calidad es muy difícil tener una buena concentración y afrontar la jornada laboral con energía, seguridad si vas a conducir o tienes que realizar esfuerzos. Incluso con un ánimo que no sea el odiar a la humanidad por no haber dormido.

Las alteraciones del sueño son realmente nocivas, y se relaciona no solo con nuestra salud física, sino también con la salud mental: depresiones, TDAH, síndrome de fatiga crónica, no pensar con claridad, tener el hambre hasta cambiada... Todo está relacionado con el descanso.

No dormir afecta a nuestro sistema inmune, no retienes información ni aprendes contenido nuevo, reflexionas mal, no fijas recuerdos. No dormir perjudica a tu corazón y tu sistema vascular no descansa.

Cuando duermes, cuando descansas, el deseo sexual aparece, te curas de enfermedades, generas hormonas como la del crecimiento, que hace que aumente la masa muscular y la reparación de células y tejidos.

Cómo intentar dormir mejor

  • Cambia los horarios siempre que sea posible.
  • Cena antes, y más ligero.
  • Haz deporte.
  • Lee.
  • Escucha música.
  • Haz alguna rutina relajante (ya sea de meditación, de masaje, de cuidado corporal con cremas).
  • Modifica la luz para crear un ambiente tenue.
  • Aleja la tecnología para evitar estimulación en tu cerebro.