Putin se abre a la paz con Ucrania
A pesar de las últimas declaraciones de la excanciller alemana, Angela Merkel, sobre los acuerdos de Minsk, el mandatario ruso ha concluido que “al final, habrá que llegar a un acuerdo”.
El conflicto entre Rusia y Ucrania está a punto de cumplir diez meses. Y, tras muchas intentonas por parte de diferentes países, Vladímir Putin se ha mostrado abierto a sentarse a negociar la paz. Así lo ha reconocido en una declaración a los medios de comunicación al margen de la cumbre de la Unión Económica Euroasiática (UEE) en Biskek, capital de Kirguistán. El mandatario ha asegurado que, aunque hay un problema de confianza, “al final habrá que negociar”.
“He dicho muchas veces que estamos listos para esos acuerdos, estamos abiertos, pero esto nos hace pensar con quién estamos tratando”, ha subrayado el titular de Rusia, que también ha manifestado sentirse “decepcionado” con las últimas declaraciones de la excanciller alemana Angela Merkel. En esta, la Mutti aseguraba que creía que la firma de los acuerdos de Minsk permitiría a Ucrania ganar tiempo para poder defenderse mejor de un ataque ruso.
“Hablando con franqueza, no esperaba escuchar esto de la excanciller”, ha asegurado Putin, que ha indicado que siempre procedió “del hecho de que el liderazgo de Alemania se comporta de forma sincera con nosotros”. Y, a pesar de que conocía la postura favorable de Merkel con Ucrania, “me pareció que el liderazgo alemán siempre buscó sinceramente un acuerdo sobre los principios que acordamos, que se lograron, incluso dentro del marco del proceso de Minsk”, ha sostenido.
En este sentido, opina que las declaraciones de la exmandataria alemana “sólo demuestran que hicimos todo bien desde el punto de vista de lanzar una operación militar especial”, ha concluido. Pero las declaraciones de Merkel no han sido las únicas que han ido en esta línea: el expresidente ucraniano, Petró Poroshenko, también ha asegurado que “no iba a cumplir” los acuerdos de Minsk.
“Esperaba que los otros participantes en este proceso fueran sinceros con nosotros. Resulta que también nos engañaron. El objetivo era solo inflar a Ucrania con armas y prepararla para las hostilidades. Tal vez todo esto debería haber comenzado antes”, ha sentenciado Putin, “pero en realidad contábamos con la posibilidad de llegar a un acuerdo en el marco de los acuerdos de Minsk”, ha añadido
Negociar con la confianza “casi en cero”
A pesar de todo, el mandatario ruso ha lanzado un mensaje que indica que están dispuestos a negociar. Aunque ha apuntado un inconveniente: la confianza, que “ya está casi en cero” por el tipo de declaraciones que han lanzado los dos exlíderes. Ello hace que surja la duda de “¿cómo negociar?, ¿sobre qué?, ¿es posible negociar con alguien?, y ¿dónde están las garantías?”, pero, “al mismo tiempo, al final habrá que negociar”, ha admitido.
Sin embargo, ha advertido que sentarse en la mesa a negociar implica que el resto de actores deberán aceptar “las realidades que se están desarrollando sobre el terreno”. Es decir, aprobar la anexión de Crimea, Jersón, Zaporiyia, Donetsk y Lugansk por parte de la Federación Rusa.
Los acuerdos de Minsk
Los acuerdos de Minsk se firmaron entre 2014 y 2015 con el objetivo de poner fin a un conflicto entre Rusia y Ucrania en la zona del Dombás. Sin embargo, estos puntos respondían “mucho más a los intereses rusos que a los intereses ucranianos”, explicó en una entrevista para elDiario.es la experta del Barcelona Centre for International Affairs, Carmen Claudín.
Y, aunque con ellos se puso fin a la violencia entre los dos países, ambos se han acusado mutuamente en varias ocasiones de haber impedido el cumplimiento del acuerdo: Rusia defiende que Ucrania no ha cumplido con los compromisos de autogobierno de Lugansk y Donetsk, meintras que Kiev opina que Moscú ha dado su apoyo a las tropas independentistas de la región.