¿Puedo cobrar el subsidio por desempleo si tengo una vivienda en propiedad?

El subsidio por desempleo es una ayuda que el Estado ofrece a todas las personas que se encuentran sin trabajo y no pueden recibir la prestación por desempleo o se encuentran en determinados supuestos. Por ello, muchos se preguntan si pueden acceder al subsidio si tienen viviendas en propiedad.

Pues bien, para acceder al subsidio por desempleo es necesario demostrar que no recibimos ninguna renta que mensualmente supere el 75% del Salario Mínimo Interprofesional (SMI). Como el SMI en 2022 es de 1.000 euros, no se podrán superar los 750 euros al mes.

Así, a la hora de aceptar o no la solicitud del subsidio, el Servicio de Empleo Público Estatal (SEPE) revisará tus ingresos para saber si superas esa cantidad. En concreto, chequeará las rentas del trabajo, pensiones, prestaciones de la Seguridad Social, becas, etc. También las rentas procedentes del capital inmobiliario o del capital inmobiliario (es decir, rendimientos procedentes de inversiones financieras y de inmuebles arrendados).

Además, se revisarán las rentas de las plusvalías o ganancias patrimoniales que proceden de la venta de bienes muebles o inmuebles y el rendimiento presunto de los bienes de patrimonio (la rentabilidad que se genera mensualmente por el patrimonio que tenemos). En total, estas rentas no pueden superar los 750 euros al mes si queremos recibir el subsidio por desempleo.

¿En qué se diferencia la prestación y el subsidio por desempleo?

Sí, el subsidio y la prestación por desempleo son dos ayudas diferentes. La principal diferencia entre ellas es la cotización: para acceder a la prestación se necesita haber cotizado 360 días, mientras que en el subsidio no. La prestación es el famoso “paro”, que se puede cobrar con una duración mínima de cuatro meses y un máximo de dos años. Se cobra según lo cotizado, siendo la cuantía mínima unos 540 euros y la máxima de 1.450 euros, según Noticias Trabajo.

Por otro lado, el subsidio por desempleo es la ayuda que se recibe cuando no se alcanzan los 360 días cotizados. Si bien el paro tiene unas cuantías variables (según los días cotizados), el subsidio por desempleo tiene una cantidad fija para todos, 463 euros mensuales, excepto la renta agraria, que puede alcanzar los 619 euros.