¿Por qué se ha retrasado el inicio de la tregua en Gaza?
Detalles y desacuerdos de último momento entre Israel y Hamás han sido el principal motivo, pero dentro del lado israelí, también hay división interna.
La expectativa de la liberación de rehenes y el inicio de una tregua entre Israel y Hamás ha generado tanto esperanza como incertidumbre en medio de la escalada del conflicto desde los atentados del día 7 de octubre por el grupo terrorista palestino Hamás.
El acuerdo entre Israel y Hamás, anunciado la madrugada anterior, establece la liberación de 50 rehenes, en su mayoría menores de edad y mujeres, a cambio de 150 presos palestinos. Sin embargo, la ejecución inmediata de la liberación se ha visto retrasada por detalles y desacuerdos de último momento.
Se prevé una negociación larga
El director del Mossad, David Barnea, se desplazó a Qatar para finalizar los pormenores del acuerdo, que incluye la liberación por etapas de los rehenes durante los días de la tregua. La complejidad del proceso se ve subrayada por las declaraciones del portavoz de las fuerzas armadas israelíes, Daniel Hagari, quien señaló que el proceso llevará tiempo y se desarrollará en varias etapas, advirtiendo sobre posibles intentos de terror psicológico por parte de Hamás.
El componente humanitario del acuerdo implica la entrada de ayuda en Gaza, incluyendo alimentos, suministros médicos y combustible. La Cruz Roja desempeñará un papel crucial en la recepción y asistencia de los rehenes, mientras que se espera que los que permanezcan bajo custodia de Hamás puedan ser visitados y atendidos médicamente.
El papel destacado de Qatar en las negociaciones ha sido fundamental, con el diplomático Mohamed bin Abdulaziz al Julaifi detallando la intensidad de las conversaciones y la falta de confianza entre las partes. El objetivo de Qatar va más allá de la tregua actual, buscando un alto el fuego permanente y mejoras en la vida del pueblo palestino.
Máxima presión contra Hamás
A pesar de la aparente pausa humanitaria, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, reiteró que la guerra continúa y que se ejercerá “máxima presión” contra Hamás. Las facciones más ultraderechistas del Gobierno expresaron resistencia al acuerdo, subrayando la división interna en Israel respecto a la negociación.
La jornada se perfila dramática, con la liberación gradual de rehenes en los próximos días, la suspensión temporal de la presión militar sobre Gaza y la liberación de presos palestinos por parte de Israel. La esperanza y la incertidumbre se entrelazan en este capítulo complejo del conflicto, donde cada movimiento puede tener repercusiones significativas en la región.