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Los dos pueblos más pequeños de España que votan al mismo partido

Illán de Vacas y Salcedillo, en Toledo y Teruel, respectivamente, suman doce habitantes. Todos han votado, por segundos comicios consecutivos, al Partido Popular.

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Los dos pueblos más pequeños de España que votan al mismo partido

Salcedillo está en Teruel. En la comarca de las Cuencas Mineras, a casi 90 kilómetros de la capital de la provincia. Tiene solamente nueve habitantes. Illán de Vacas está en Toledo, en un terreno llano no muy lejos de Torrijos; y su población es de tres personas. Dos lugares que no tenían nada en común, más allá de su condición de afiliado al fatídico club de la España Vaciada, hasta las elecciones del 28M.

Y es que ambos pueblos, uno turolense y otro toledano, sólo han votado una candidatura. Al Partido Popular. Tras el recuento al completo, que no ha sido especialmente largo, no se ha notificado ni una sola abstención. Tampoco un voto en blanco. Es clara y meridiana la intención electoral de los votantes en estas dos casi aldeas.

“Es igual que en Madrid, que en Barcelona”

Avisaba al comienzo de la jornada el alcalde de Illán de Vacas, Javier Bollaín, que la mesa electoral estaría abierta hasta las ocho de la tarde. Lo hizo sabiendo que iba a revalidar, en unas declaraciones peculiares a Europa Press, y después de que ya votasen los tres habitantes del pueblo. Todos lo hicieron a primera hora. Pero ahí estaba la mesa. Fiel, intocable.

“Alguien se tiene que presentar. Supone cierto esfuerzo personal, hay pocas ayudas por parte de la administración”, exponía Bollaín; a lo que agregaba, entre aires épicos, que “da más gusto vivir que ser alcalde”. Y no se equivocaba en sus cavilaciones electorales. Ha vuelto a ganar. Con el mismo resultado. Los tres lo han vuelto a hacer.

Salcedillo
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Salcedillo

Lo mismo ha ocurrido en Salcedillo. El lugar menos poblado de Aragón, según el INE, también venía de una mayoría absoluta del Partido Popular respaldada por unos nueve habitantes que, igual que sus colegas toledanos, han roto toda la utilidad del secreto voto.

“La carga administrativa se parece a la de un Ayuntamiento grande, es igual que en Madrid, que en Barcelona, que en Illán de Vacas”, resume Bollaín. Y en esa frase encierra la verdadera esencia de las elecciones menos discutidas del país: pensar en grande, por pequeño que sea.