António Costa dimite como primer ministro de Portugal

António Costa, primer ministro de Portugal desde el año 2015, ha presentado su dimisión este martes. A primera hora de la mañana saltaba la noticia, después de que la Policía registrara su domicilio fiscal en el marco de una operación por presuntos delitos de corrupción, tráfico de influencias y prevaricación vinculados al sector de litio y el hidrógeno verde.

Tras conocerse que el Tribunal Supremo había abierto una investigación para determinar el papel del primer ministro en la concesión de dos explotaciones de litio (en Montalegre y Covas de Barroso) y un proyecto de producción de hidrógeno verde en Sines, Costa visitó en una primera ocasión al presidente de la República, Marcelo Rebelo de Sousa, antes de presentarle su dimisión en su residencia oficial de Belém.

Costa, asegura, se va “con la conciencia tranquila”. Durante la mañana, las autoridades lusas han detenido a dos personas del círculo del ya exprimer ministro, por irregularidades en la concesión de la explotación de proyectos energéticos: se trata de Vítor Escária, jefe de gabinete de António Costa, y el empresario Diogo Lacerda Machado, un amigo que le confió en años pasados misiones como la nacionalización de la aerolínea portuguesa TAP.

Las detenciones llevadas a cabo por la Policía se realizaron para evitar el riesgo de fuga, la continuación de la actividad delictiva y la alteración de la investigación judicial, que pretende esclarecer si ha habido delitos de prevaricación, corrupción pasiva y activa y tráfico de influencias. En las próximas horas, ambos detenidos pasarán a disposición judicial. En total, la cifra de detenidos se eleva a cinco, mientras que se han registrado 42 registros en varios ministerios.

Qué pasará ahora

“Fui sorprendido hoy con la información oficialmente confirmada por la Fiscalía. La dignidad de las funciones de Primer Ministro no es compatible con cualquier sospecha sobre su integridad, su buena conducta y menos todavía sobre la sospecha de la práctica de cualquier acto criminal”, dijo Costa en un comunicado a la nación portuguesa, justificando su decisión de presentar su dimisión.

Tras aceptar el presidente de la República la dimisión de Costa, ahora falta conocer si se decide la disolución del Parlamento y la convocatoria de elecciones anticipadas o si, por el contrario, y menos probable, el gobierno socialista (con mayoría en el Parlamento), presenta otro candidato.

Costa, que se ha declarado abierto a colaborar con la justicia, en cualquier caso descarta presentarse a unas nuevas elecciones. “Los procesos criminales raramente son rápidos. Es una etapa de la vida que se cierra y que la cierro con la cabeza erguida”, ha asegurado.

Los hechos

Entre los registros llevados a cabo por las autoridades portuguesas se encuentran, además de la residencia del primer ministro, los ministerios de Infraestructuras y de Medio Ambiente y Acción Climática, cinco despachos de abogados, la Cámara Municipal de Sines y algunos organismos públicos y domicilios.

La investigación actual comenzó a finales del año 2019, después de una denuncia anónima para determinar si había habido tratos de favor hacia empresas portuguesas en la explotación de un negocio de hidrógeno verde en Sines. El proyecto inicial para exportar hidrógeno verde a Holanda había sido presentado por un empresario de este país, pero posteriormente el Gobierno portugués implicó de forma pública a tres empresas lusas (EDP, Galp y REN) en el mismo.