Lanzan puré de patatas a un cuadro de Monet
El suceso ha ocurrido en el Museo Barberini de Potsdam. El personal especializado se encuentra ya trabajando para determinar los posibles daños en el cuadro.
Dos activistas del grupo alemán de protesta por la protección del clima Última Generación han atacado este domingo un cuadro del pintor francés Claude Monet, expuesto en el Museo Barberini de la ciudad de Potsdam, en Alemania. Más concretamente, han lanzado puré de patata contra uno de los cuadros de la serie Los Almiares (Les Meules).
A continuación, estos activistas han pegado sus manos contra la pared donde colgaba el cuadro. El personal especializado ya trabaja para examinar posibles daños en el cuadro. En dicha acción participaron cuatro personas, incluidas dos activistas, que fueron las protagonistas de lanzar el puré de patatas.
Incidentes similares
El grupo ha publicado en redes sociales un vídeo del ataque en el que se pide a la clase política que lleve a cabo medidas para limitar el cambio climático. La obra, pintada en el año 1890, fue subastada en 2019 por un precio superior a los 110 millones de euros.
Y es que hace una semana, activistas arrojaron sopa de tomate al cuadro ‘Los Girasoles’ del artista holandés Vincent van Gogh en la National Gallery de Londres, dañando ligeramente el marco. Por tanto, esto parece ser un movimiento que está manifestándose bastante en las últimas semanas.
El cuadro de la serie ‘Los Pajares’ pertenece a la exposición permanente del Museo Barberini, procedente de la colección de su fundador, el multimillonario Hasso Plattner. La Policía se ha limitado a confirmar que hay una operación en marcha en el museo.
“¿Qué vale más, el arte o la vida?”
“Hacemos de este Monet el escenario y del público la audiencia. ¡Si se necesita una pintura, con puré de patatas o sopa de tomate (en referencia al ataque mencionado anteriormente), para que la sociedad recuerde que el curso de los combustibles fósiles nos está matando a todos, entonces os daremos puré de patatas!”, exhibieron en Twitter.
Además, añadieron: “Le estamos haciendo a la sociedad la misma pregunta que las dos mujeres de la sopa de tomate en la Galería Nacional de Londres la semana pasada: ¿Qué vale más, el arte o la vida? Cada vez más personas se niegan a aceptar la destrucción y el peligro de los seres humanos, a aceptar la vida en silencio”.