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La sequía hace emerger un antiguo pueblo en Cataluña

El antiguo pueblo de Tiurana (Lleida) reaparece en el pantano de Rialb después de que la sequía haya dejado sus niveles de agua al 14%.

Pantano de Rialb / Wikimedia Commons
Pantano de Rialb / Wikimedia Commons

La falta de lluvias que afecta a casi todo el país, sumado a las altas temperaturas, ha provocado una sequía que afecta a gran parte de España. Los embalses se encuentran en situación crítica y numerosos municipios del país ya han aplicado restricciones para tratar de dosificar las reservas de agua. En medio de este panorama, algo insólito ha ocurrido: un pueblo ha emergido de un pantano.

Se trata del antiguo pueblo de Tiurana (Lleida), que fue inundado por el pantano de Rialb en 1999. Las reservas de este pantano se encuentran al 14% de su capacidad, su nivel más bajo de los últimos 15 años, lo que ha permitido que algunos edificios de la antigua ciudad se asomen a la superficie. Las imágenes y vídeos sobre el reflote de Tiurana pueden verse en este artículo del diario regional Segre.

Según la fuente citada, el pueblo está sumergido bajo el Rialb desde 1999 y ya reapareció en 2007 durante la última gran sequía. Ahora, la falta de agua ha dejado ver la antigua carretera, restos de edificios que fueron demolidos e incluso una hormigonera abandonada. El Servei Meteorològic de Catalunya ha calificado de “excepcional” la sequía en esta zona del litoral.

Tiurana se reconstruyó en el entorno de la ermita de Solés, y el nuevo alcalde, Ángel Villarte, se desplazó hasta los restos del pueblo sumergido para poder observarlos. “Ahora vuelven a aflorar los sentimientos de la pérdida, todo el sufrimiento que hubo cuando tuvimos que marchar”, señala Villarte, según recoge Nius. “Cualquiera de ellos, incluso con los ojos cerrados, podría reconocer dónde estaba su antigua casa”, explica el primer alcalde.

La sequía también ha provocado el descenso en el nivel del agua del pantano de Canelles, lo que ha dejado al descubierto las ruinas del viejo pueblo de Blancafort y la ermita de Sant Salvador.

Las cuencas catalanas, al 42% de su capacidad

Cataluña es una de las comunidades más afectadas por la sequía. Sus reservas de agua de las cuencas se encuentran al 42% y se prevé que seguirán bajando. La Generalitat ha limitado el uso de agua en 150 municipios a 200 litros diarios por persona, mientras que en Barcelona se espera que a partir de septiembre se limite el suministro de agua. En algunos municipios incluso se suministra agua con cisternas a los depósitos de red municipal.

La Generalitat ya ha constituido la comisión interdepartamental de la sequía, que celebró su primera reunión este martes para poder informar a sus integrantes del estado y la evolución de la situación y de las medidas que se están llevando a cabo en función de los escenarios previstos en el Plan Especial de Sequía.