La explicación del Financial Times a cómo España impulsa el empleo indefinido
La prestigiosa publicación estadounidense ha alabado el empeño del gobierno por reducir todo lo posible el número de contratos temporales
La política laboral del gobierno de coalición está empezando a llamar la atención en el extranjero. Los esfuerzos, liderados por el ministerio de Trabajo de Yolanda Díaz, por reducir al máximo el número de contratos temporales están dando sus frutos. En apenas un año, la tasa de menores de 30 años con contrato temporal ha caído del 58 % al 39 %. En los índices generales, estos contratos suponen el 18 %.
El Financial Times, una de las publicaciones económicas más prestigiosas del mundo, ha analizado en un reciente artículo estos nuevos movimientos del ejecutivo. En la pieza, el periódico pone de relieve los buenos resultados que se han conseguido hasta ahora. Se recuerdan, en primer lugar, los múltiples efectos negativos que puede tener sobre la economía la proliferación de los trabajos temporales. A mayor inseguridad económica, menos propenso será el asalariado de participar en el consumo, lo que desincentivará el emprendimiento económico.
Esta posición típicamente keynesiana casa con el concepto del flujo circular de la rente, que establece que las familias y las empresas son dos entes que se retroalimentan y que se necesitan mutuamente. A mayor ingresos en los hogares, más posibilidad de que el mercado se reavive y que, por lo tanto, las empresas aumenten su beneficio, que a su vez aumentarán la plantilla para responder a la creciente demanda de bienes y servicios.
En la buena dirección
Sobre este principio básico se ha erigido buena parte de la legislación económica de varios gobiernos europeos, especialmente de aquellos de corte socialdemócrata. En definitiva, lo que se busca con este rumbo es mejorar los derechos de los trabajadores (en este caso luchando contra la precariedad y la temporalidad) y así, colateralmente, también crear un clima favorable para el entorno empresarial. Y es que, desde el comienzo, las nuevas medidas se han hecho en continuo diálogo tanto con los sindicatos como con el sector privado, intentando buscar puntos de acuerdo.
El Financial Times también pone de relieve la figura del fijo discontinuo, una adición del gobierno que permite el trabajo estacional sin perder la vinculación contractual con el empleador. Paso hacia la mayor flexibilidad del mercado pero sin sacrificar la meta innegociable de la persecución contra la inestable temporalidad. No obstante, aunque de ánimo fundamentalmente halagador para la Moncloa, el texto también advierte de que es demasiado pronto para lanzarse a conclusiones definitivas sobre el éxito o no de estas medidas, y que España sigue siendo un país con una tasa de temporalidad que está por encima de la media europea.