Finlandia toma una decisión drástica con Rusia: levantará una valla en la frontera

Después de la huida masiva de ciudadanos rusos hacia Finlandia tras el anuncio de Putin de la movilización parcial de reservistas, y con el objetivo de protegerse de la inmigración irregular, el Gobierno de Finlandia ha alcanzado un acuerdo unánime con todo el arco parlamentario para levantar una valla en los tramos más vulnerables de la frontera con Rusia.

Así justificó la decisión la Primera Ministra finlandesa, Sanna Marin, después de que la medida fuese acordada entre el Ejecutivo y la oposición. “Se trata de poder asegurarnos de que la frontera está bien vigilada, y de ser capaces de anticiparnos a lo que pueda ocurrir en ella”. La previsión es que las obras duren un máximo de cuatro años, y la valla tenga una extensión máxima de 260 kilómetros, es decir, entre un 10 y un 20 % de los 1.340 kilómetros de frontera entre Finlandia y Rusia.

El proyecto, que tendrá una inversión de “varios cientos de millones de euros” según ha explicado el Gobierno finlandés, contempla la instalación de una valla de varios metros de altura y con concertinas en la parte superior. Además, tendrá cámaras de videovigilancia en los tramos fronterizos que sean considerados de mayor riesgo. También se incluye una valla de prueba y cuya extensión será de tres kilómetros en el sureste del país.

De este modo, el Ejecutivo de Marin cuenta con todo el apoyo parlamentario, entre los que se encuentran formaciones políticas como el Partido del Centro, el Partido Democristiano y la formación de ultraderecha Partido de los Finlandeses. Las estimaciones de las autoridades del país, prevén que el comienzo de las obras se produzca a partir del próximo verano.

Sin embargo, no es la primera medida que Finlandia toma con respecto a Rusia. El pasado mes de septiembre, ante la huida de ciudadanos rusos del país presidido por Vladimir Putin. La primera medida adoptada por el Ejecutivo fue la restricción de la concesión de visados a ciudadanos rusos. Una medida que evolucionó hasta el cierre de sus fronteras a los turistas rusos.

Más de 50.000 personas en una semana

Uno de los objetivos que buscó Finlandia era reducir a la mitad el tráfico fronterizo en su territorio. Sólo en los siete días consecutivos al anuncio de la movilización ordenada por el presidente ruso, aumentó en un 86% el número de personas que traspasaron la frontera. En datos, se estima que más de 50.000 ciudadanos rusos llegaron a Finlandia.

La situación también se produjo en otros países fronterizos con Rusia, como es el caso de Georgia y Mongolia. Según los cálculos del Ministerio del Interior georgiano, a finales del mes de septiembre llegaron más de 50.000 rusos, que se suman a los más de 40.000 que llegaron desde el inicio de la ofensiva en Ucrania.