Feijóo come en secreto con Casado un año después de su debacle
Según ha adelantado El País, el presidente del PP y su predecesor se han reunido durante una hora y media en una taberna cercana al Senado.
El actual líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, y su predecesor, Pablo Casado, han comido en secreto este miércoles, un año después de que acabase la carrera política de Casado tras un conflicto interno con la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Según El País, los dos políticos se han reunido en La Taberna del Alabardero, un restaurante cercano al Teatro Real y al Senado.
Según han explicado fuentes del PP al diario citado, la fecha de la comida ya estaba fijada de antemano, y a pesar de la coincidencia, no se planeó por el aniversario de la caída de Casado. Ambos mantienen una buena relación, y se ven “con cierta periodicidad, sin que el exlíder del PP haya guardado rencor” a Feijóo por haberle sustituido. La comida ha durado en torno a una hora y media, en un ambiente de “cordialidad”, se han reunido solos y han salido de la taberna “discretamente por separado”, según El País.
“Feijóo y Casado tienen una relación fluida que han ido manteniendo en el tiempo, y en el último año han compartido reflexiones en diversas ocasiones. La comida se enmarca dentro de un clima de normalidad y respeto entre dos personas que han tenido el honor de presidir el Partido Popular”, explican fuentes populares.
Ha pasado un año, pero siguen apareciendo novedades del caso Casado. Hace unos días, salieron a la luz los mensajes que el exlíder del PP recibió cuando denunció las supuestas prácticas corruptas de Ayuso. “Enhorabuena, presidente. Sinceridad y verdad. Ese es el camino”, escribieron en el grupo de WhatsApp los portavoces parlamentarios, Cuca Gamarra y Javier Maroto, cuando Casado lanzó en cadena Cope un ataque directo contra Ayuso.
El PP rechaza fichar de nuevo a Casado
La reunión también ocurre dos días después de que El País publicase el rechazo del PP a rehabilitar a Casado en el medio plazo. La dirección nacional del partido cree que el exlíder “no suma”, pero también teme la reacción de Ayuso, que todavía tiene muy presente el conflicto que el año pasado, de una forma u otra, dejaría una cabeza en el camino: la suya o la de Casado. “Organizas un acto con Casado y tienes a Ayuso una semana cuestionándolo, ¿qué nos aporta? En política hay que hacer cosas que tengan algún beneficio”, explicaron al medio citado fuentes populares.
“Mientras ella esté ahí, ni Casado ni los de su alrededor tienen nada que hacer. Ahora mismo está todo muy reciente, y Feijóo no tiene más remedio que estar junto a ella y no contra ella, porque su fuerza mediática sigue siendo brutal”, señala un veterano popular.
Casado, de momento, seguirá siendo una figura del pasado reciente del Partido Popular. Ayuso ganó aquella batalla. Durante el conflicto, la estimación de voto del PP cayó y se temía la migración de simpatizantes a otros partidos. Sin embargo, tras el nombramiento de Feijóo, el PP remontó en las encuestas y consiguió unos resultados que no quiere arriesgar en este 2023, el gran año electoral en el que coinciden los comicios locales, autonómicos y generales del país.