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El superordenador más potente de Europa

Este permitirá avances científicos en medicina e investigación climática a un ritmo más rápido, como por ejemplo servir de ayuda al desarrollo de vacunas o el diagnóstico de cáncer.

El superordenador Lumi, el tercero más potente del mundo.
LUMI

El centro finlandés de tecnología informática CSC ha inaugurado en la ciudad de Kajaani (Finlandia central) el superordenador más potente de Europa denominado ‘Lumi’. Este es el tercero más potente del mundo con un rendimiento de 151,9 petaflops por segundo, lo que significa 151.900 billones de operaciones por segundo.

Lumi tan solo es superado por el sistema estadounidense Fontier, el único a exaescala real, con 1,1 exaflops por segundo, y por el japonés Fugaku, con 442 petaflops por segundo”. La capacidad de computación de Lumi, cuya potencia máxima puede alcanzar los 550 petaflops por segundo, equivale a la de 1,5 millones de ordenadores portátiles modernos, que apilados formarían una torre de 23 kilómetros de altura.

Rápido y sostenible

Es uno de los superordenadores más sostenibles del mundo desde el punto de vista medioambiental, ya que solo utiliza energía hidroeléctrica, tiene emisiones de CO2 y su calor residual sirve para calentar el 20% de la ciudad de Kajaani. Asimismo, utiliza sistemas de refrigeración natural, por lo que reduce sustancialmente la huella de carbono anual de toda la ciudad.

Este dispositivo es más rápido y eficiente en términos energéticos de Europa. Con un coste de 202 millones de euros, el proyecto LUMI (Large Unified Modern Ingrastructure) forma parte de la Empresa Común Europea de Computación de Alto Rendimiento (EuroHPC JU), que cuenta con la presencia de otros siete superordenadores ya instalados o en construcción en varias ciudades europeas, entre ellas Barcelona.

El 20% de la capacidad está reservada para la industria y pequeñas empresas europeas

El superordenador está participado por un consorcio formado por una decena de países europeos (Finlandia, Bélgica, Chequia, Dinamarca, Islandia, Estonia, Noruega, Polonia, Suecia y Suiza), que podrán disponer de su capacidad de su supercomputación para sus propios proyectos de investigación.

De hecho, este consorcio aportó la mitad de la financiación para la construcción del superordenador Lumi y la Unión Europea, a través de EuroHPC JU, costeó la otra mitad. Según los responsables del proyecto, el 20% de la capacidad estará reservada para la industria y las pequeñas empresas europeas.

Permitirá avances científicos en medicina e investigación climática

Todo ello con el objetivo de impulsar la innovación y los negocios basados en el uso masivo de datos, como la inteligencia artificial. El resto se dedicará a la investigación científica, en áreas como el cambio climático, la medicina, las matemáticas, la ingeniería, la ciberseguridad y las ciencias sociales, entre muchas otras.

La vicepresidenta de la Comisión Europea y comisaria de Competencia, Margrethe Vestager, señala que “gracias a su enorme capacidad informática, Lumi permitirá avances científicos en medicina e investigación climática a un ritmo más rápido. Podría ayudar al desarrollo de vacunas, diagnóstico de cáncer o mitigación de los efectos del cambio climático”.