El hombre que se encontró 9 millones de pesetas en su casa tiene posible comprador
El diseñador Pepe Cruz se ha interesado por los billetes encontrados por Toño Piñeiro y que el Banco de España no le permite cambiar a euros.
A comienzos de este mes conocimos unas de las historias más rocambolescas conocidas en los últimos años: Toño Piñeiro, un empleado de la construcción con su residencia habitual en Valencia, encontró nueve millones de pesetas (unos 54.000) euros, en una casa recién comprada y que estaba restaurando. Lo hizo en dos veces diferentes (primero unos 30.0000 euros y después cerca de 24.000).
“Cada vez que vengo acabo encontrando dinero. Quizás en Navidad, cuando volvamos de Valencia para seguir con la restauración, aparecen más”, bromeaba Piñeiro. El problema es que en la segunda ocasión ya había cumplido el plazo para cambiar las pesetas a euros (desde el pasado julio de 2021 el Banco de España ya no los canjea). Pero, una vez vista la repercusión que ha tenido su hallazgo, asegura sentirse desbordado.
Así lo expresa en El Progreso de Lugo, donde asegura que desea vender los billetes que en banco no le permite cambiar. Dicho medio se puso en contacto con el diseñador Pepe Cruz, uno de los primeros interesados en adquirirlos, en concreto la serie de billetes de 200, 500, 1.000, 2.000. 5.000 y 10.000 pesetas que fueron puestos en circulación entre 1979 y 1985. El motivo de su interés es que fueron diseñados por su padre, José María Cruz Novillo.
El valor de los billetes, a la baja
La familia del diseñador guardaba la primera hornada de esos billetes, pero algunos fueron robados a principios de los años 90 y otros se han ido deteriorando con la humedad. Ahora, pretende recuperarlos “a modo de fondo de archivo de nuestro estudio”. Durante los últimos años, asegura, ha ido comprando billetes sueltos que fueron diseñados por su padre. “Hasta hace un año, cuando el Banco de España dejó de transformarlos a euros, no era demasiado fácil encontrarlos, debido a que la gente los cambiaba”.
Muchos de estos eran vendidos al carecer de valor físico para quienes los poseían, pero en el caso del diseñador cuentan con el inventivo del valor sentimental. Antes del 2021, los billetes de 5.000 pesetas se pagaban a precio de cambio por los coleccionistas, unos 30 euros. Ahora, con más a la venta, su valor ha caído, aunque algunas numeraciones sí son más caras.
Por su parte, Toño asegura que quiere guardar, al menos, un billete de cada valor. Y en caso de que finalmente Pepe Cruz no se hiciera con los billetes, un coleccionista canario también ha mostrado interés en hacerse con este ‘tesoro’ encontrado en la casa de A Pousada. El estudio de diseño y arquitectura Cruz Novillo, a lo largo de su historia, ha creado logos para Correos, Renfe o Repsol, además de los mencionados billetes de pesetas.