El engaño de Ucrania a Rusia para que pierda cohetes

Ucrania continúa con su objetivo de reconquistar el territorio perdido y avanzar sus posiciones para debilitar a las tropas rusas. El último movimiento de las Fuerzas Armadas ucranianas para desgastar a Rusia ha sido la apuesta por señuelos de madera con forma de HIMARS.

Mediante este gesto, las tropas ucranianas lograron destruir misiles rusos de largo alcance, y desgastar los recursos logísticos rusos para las próximas batallas en el sureste del país, según la información ofrecida por ‘The Washington Post’. Unos señuelos con los que Ucrania atrajo a unos diez misiles Kalibr, lo que ha llevado a Kiev a un incremento de la producción de este material, en un esfuerzo por atraer a Moscú a que dispare sus misiles contra objetivos falsos.

Cuando los drones rusos localizan uno de estos señuelos, los identifican como sistemas reales de misiles y realizan el posterior lanzamiento de un ataque contra estos falsos objetivos. Kiev insiste que ninguno de los sistemas HIMARS proporcionados por Estados Unidos, y que forman parte de la ayuda militar proporcionada por Washington, han sido destruidos. “Rusia ha afirmado haber alcanzado más HIMARS de los que hemos enviado”, explicó un funcionario norteamericano al medio citado.

Estados Unidos ha sido el país que más dinero ha invertido en ayuda militar para Ucrania. Además de munición, ha enviado misiles antiaéreos, vehículos armados, lanzagranadas, ametralladoras, chalecos antibalas, lanza misiles antibuque, obuses, así como ayuda humanitaria que incluye medicinas , alimentos, agua potable. Todo ello con una partida que supera los 4.000 millones de dólares.

Las armas proporcionadas por el Ejecutivo de Joe Biden, han sido fundamentales para contener el avance de las tropas rusas, así como para atacar depósitos de armas y líneas de suministro. Un envío de armas que tambiçen es vital para las tropas de Kiev de cara al objetivo de recuperar la región de Jersón, ocupada por los rusos desde el inicio de la invasión de las fuerzas armadas rusas. Desde la capital ucraniana aseguraron que a Rusia le queda, como mucho, el “45% de sus misiles”.

Jersón, el inicio de la “reconquista”

Durante las últimas semanas Ucrania ha estado preparándose para lanzar una ofensiva al ejército ruso que ocupa parte de su territorio. El presidente del país, Volodímir Zelenski, repitió en varias ocasiones que conseguirán recuperar las zonas ocupadas por las fuerzas del Kremlin.

“Ucrania está recuperando lo suyo y devolverá las regiones de Járkov, Lugansk, Donetsk, Zaporiyia, Jersón, Crimea y, por supuesto, nuestras aguas territoriales en los mares Negro y Azov”. El último ataque a posiciones rusas se produjo cuando el ejército ucraniano consiguió cortar el apoyo logístico a las tropas rusas a través del río Dnipro, con ataques a puentes, pontones y transbordadores.