Desastre natural en Australia: mueren 200 ballenas
Los equipos de expertos han asegurado que tienen unos 35 animales con vida en la playa y su objetivo principal será el rescate y liberación de estos animales.
Alrededor de 200 ballenas piloto murieron después de quedar varadas en una remota playa de la bahía de Macquarie, en el oeste de la isla australiana de Tasmania. Tan solo 35 de las 230 ballenas piloto encontradas en la playa el día de antes continuaban vivas, aseguró a los periodistas el responsable del servicio de las operaciones de los servicios locales de vida salvaje, Brendon Clark.
Este masivo varamiento se ha producido exactamente dos años después de que unas 470 ballenas piloto, también denominadas como calderones, se quedaran varadas en este mismo lugar, de las cuales solo un centenar pudieron ser rescatadas y llevadas a altamar.
No han podido esclarecer los motivos
Las imágenes aéreas del lugar han mostrado una larga fila de ballenas, que las autoridades consideran que son ballenas piloto, atrapadas sobre la superficie a lo largo de decenas de metros de la playa. Estos y otros mamíferos marinos quedan varados con frecuencia en las costas del sur de Australia y Nueva Zelanda.
Los expertos todavía no han podido esclarecer los motivos, aunque los suelen atribuir a enfermedades, errores de navegación, cambios repentinos en las mareas, la persecución de depredadores o a condiciones meteorológicas extremas.
Rescate y liberación
“Tenemos unos 35 animales con vida en la playa y nuestro objetivo principal será el rescate y liberación de estos animales. Desafortunadamente tenemos una alta tasa de mortalidad en este varamiento. Esto se debe principalmente a las condiciones de exposición en la playa Ocean”, exhibió Clark.
Desde el descubrimiento de los animales, la población de la zona cubrió a las ballenas piloto con mantas y las roció con cubos de agua para mantenerlas con vida. Las ballenas piloto, que pueden crecer hasta los seis metros, son animales altamente sociales y siguen a sus pares que pueden ponerse en peligro.
Advertencia a la población
El director general del Consejo de la Costa Occidental, David Midson, instó a la gente a mantenerse alejada. “Las ballenas son una especie protegida, incluso ya muertas, y es un delito interferir con un cadáver”, indicó la agencia medioambiental.
Los científicos creen que las ballenas evolucionaron de mamíferos terrestres de cuatro patas. Ahora, están perfectamente adaptadas a una vida submarina, tienen un cuerpo aerodinámico y han perdido casi todo el pelo externo para evitar la fricción y mejorar el deslizamiento por el agua.