Advierten de cómo hay que sacar dinero del cajero para hacerlo con seguridad
Utilizar cajeros que cuenten con métodos de vigilancia como cámaras o sistemas de bloqueo de puertas es uno de los principales consejos del Banco de España.
Sacar dinero de un cajero automático es un gesto que se hace de manera cotidiana y sin aparentes dificultades. Sin embargo, es una tarea que puede entrañar riesgos para la seguridad.
Por ello, tal y como recoge Noticias Trabajo, es importante seguir las recomendaciones que ha efectuado el Banco de España para las personas que se dispongan a retirar dinero de un cajero.
Uno de los principales consejos del organismo es utilizar cajeros que cuenten con métodos de vigilancia, ya sean virtuales o físicos, como son las cámaras o un sistema de bloqueo de puertas.
Más allá de ello, también es importante comprobar que no hay nadie sospechoso en los alrededores y, en cualquier caso, tapar el teclado con la mano a la hora de introducir el pin de la tarjeta para evitar ser víctima de las cámaras que los delincuentes pueden instalar para grabar la secuencia numérica de seguridad.
Sospechar si cambian los pasos habituales
Los criminales pueden llegar incluso a alterar el software de los cajeros para realizar copias virtuales de la tarjeta. Por ello, si cambian los pasos habituales para sacar dinero o se perciben pantallas extrañas, se debe interrumpir la operación.
Igualmente, una vez que se haya recibido el dinero, se debe guardar con rapidez para evitar llamar la atención de posibles malhechores. El Banco de España sugiere, además, fijar límites relativamente bajos para la extracción de dinero en efectivo con el objetivo de reducir el perjuicio económico de un posible robo.
El dinero en efectivo recupera terreno
El importe de las operaciones de retirada de fondos en cajeros automáticos ha experimentado un crecimiento del 8,74% en 2021, hasta un total de 111.131 millones de euros, según datos del Banco de España.
Se trata de una cifra muy similar a la que se registraba antes de la pandemia y que refleja que el dinero en efectivo recupera terreno tras la contracción a causa de la COVID-19. En el año 2020 la extracción de dinero llegó a caer un 18,3%, mientras que en el año 2021 se han vuelto a impulsar las retiradas de fondos.