El pasado domingo, 20 de marzo, se subió a Youtube un video que mostraba como un grupo de mujeres increpaba en un bar de Barcelona a Álvaro Reyes, youtuber “especialista en técnicas de ligue”. La polémica no se hizo esperar y los comentarios en redes sociales y en el propio video se posicionaban por un lado criticando las enseñanzas de Álvaro Reyes y, por el otro, tachando de radicales e igualmente poco adecuadas las formas del grupo feminista.

Los videos de Álvaro Reyes enseñan técnicas de ligue que van desde el efecto sorpresa a la seducción más lenta. Las imágenes de la "puesta en escena" se intercalan frecuentemente con consejos de conversación y lenguaje gestual con mujeres. En un vídeo, incluso se reta a sí mismo a ligar despeinado y vestido con chándal para tratar de demostrar el valor de otros aspectos en el arte de la seducción. Reyes respondió a la polémica con un vídeo en el que asegura que se han malinterpretado sus enseñanzas.

Pero además de Reyes, existen otros youtubers que utilizan supuestas cámaras ocultas en las que el protagonista consigue besar a desconocidas y/o emplazarlas a hablar más adelante vía móvil. En algunos casos hay dos y hasta tres chicas.

¿Cuándo surge esta moda? Si hubiese que fijar en una fecha el boom de los cursos de seducción, quizá habría que remontarse a casi una década, cuando estas diferentes técnicas quedaron plasmadas en una novela superventas titulada ‘El Método’, de Neil Strauss. El libro, que incluye consejos de caracterización dignos de ‘El Santo’, trucos de ilusionismo y pautas para alcanzar una verborrea que pueda, según esa teoría, convencer a cualquier mujer.

Este tipo de técnicas ya se mostraron en la película ‘Magnolia’ en 1999, en la que el protagonista, interpretado por Tom Cruise, hacía negocio con la inseguridad de otros hombres a la hora de seducir.