Bobbi Kristina Brown, hija de la cantante Whitney Houston, murió por una combinación de ahogamiento en una bañera e intoxicación por varias drogas y alcohol, según los resultados de la autopsia dada a conocer hoy por las autoridades.
De acuerdo con la oficina del médico forense del condado de Fulton, en el estado de Georgia (Estados Unidos), la joven murió a causa de neumonía por encefalopatía isquémica hipóxica e inmersión bajo el agua con intoxicación por mezcla de drogas. Entre las drogas citadas en el informe, está el alcohol, marihuana, benzoilecgonina (sustancia relacionada a la cocaína), benzodiazepínicos (sedante) y morfina. El informe califica la forma de muerte como "indefinida", tras descartar "causa natural".
Un juez de la corte del condado de Fulton, en el área metropolitana Atlanta, ordenó este jueves revelar la autopsia que estaba sellada desde septiembre, cuando la corte consideró que la difusión de este documento podría causar un eventual peligro a los testigos y comprometer la investigación de la muerte de la joven.
Bobbi Kristina, de 22 años, fue hallada inconsciente en la bañera de su casa en Roswell (Georgia) en enero de 2015 por su pareja, Nick Gordon. La joven falleció en junio del año pasado en un centro de cuidados paliativos en Atlanta después de pasar seis meses en coma. Era la única hija del matrimonio entre los cantantes Bobby Brown y Whitney Houston.
Houston falleció en febrero de 2012 a los 48 años en circunstancias similares: ahogada en la bañera de un hotel en Beverly Hills tras años de batallar con adicciones a diversas sustancias.
Los apoderados de Brown interpusieron a finales de junio una demanda contra Gordon, por 10 millones de dólares por abuso físico y retirar sin autorización dinero de la cuenta bancaria de Bobbi Kristina.