No tiene explicación: el fallo a puerta vacía de Leo Baptistao
El delantero del Espanyol tuvo el 1-0 en sus botas: un balón suelto, botando en el área pequeña y sin portero delante. La gente se echó las manos a la cabeza.
Pudo ser el gol que pusiese en ventaja al Espanyol y, de hecho, parecía que iba a serlo. Pocas veces se ve una ocasión tan clamorosa en un estadio de fútbol. Pero la suerte no estuvo del lado de los pericos y, especialmente, de su delantero, Leo Baptistao.
Fue una doble ocasión. Sergio García llegó a línea de fondo y centró atrás a Gerard Moreno, que remató de cabeza a gol, pero que Luna sacó bajo palos. El rechace le quedó a Baptistao, que como ya le pasara en la primera parte, mandó el balón a las nubes desde el área pequeña.