Donovan Mitchell: una muñeca rota nos regaló su carrera NBA
El campeón del concurso de mates era más de béisbol que de baloncesto. Jugó en Louisville y fue traspasado en la noche del draft.
Para entender un poco mejor el increíble momento que vive Donovan Mitchell tenemos que retroceder hasta su segundo año de instituto. El año que cambió su vida.
En Canterbury School (New Milford, Connecticut), su primer instituto, practicaba tanto béisbol como baloncesto, pero siempre con el primero de los dos deportes como gran objetivo. Quería jugar en la MLB (Major League Baseball). Quería jugar en los Mets.
Realizó más de 10 entrenamientos previos con equipos NBA, cogiendo unos 15 vuelos en un mes para recorrer el país de punta a punta. El primero fue con los Jazz, que tenían el número 24 del draft. "Me salí", aseguró Mitchell en la mencionada entrevista. Aquel verano entrenó también con Carmelo Anthony y JR Smith, mientras su potencial posición en el draft no dejaba de subir.
Llegó la noche del sorteo y Mitchell creía que se iría a Charlotte. Los Hornets tenían el número 11 del Draft. "Malik Monk empezó a caer y pensé: igual me eligen o igual no... Después les tocaba a los Pistons, con los que había hecho un gran entrenamiento. Pero escogieron a Luke... Con Denver (tenían el 13) no había entrenado, así que pensé que no me iban a elegir, y el de Miami (14) había sido el peor entrenamiento de mi vida. Entonces pensé: espero que me elijan los Blazers (15), porque 16, 17 y 18 no tengo ni idea. No tenía ni idea de que los Jazz habían cerrado un traspaso para subir posiciones", dijo el novato en su día (vía OfficialHoophall).
Los Jazz, el primer equipo NBA con el que había entrenado, traspasaron tanto su pick (el 24) y como a Trey Lyles a Denver para poder elegir en el 13 a Donovan Mitchell. Un traspaso que no levantó demasiadas cejas en su momento, pero que ahora parece uno de los grandes aciertos/robos del draft.
Ocho meses después de aquello, el novato de los Jazz lidera su camada en puntos (casi 20 por partido; ha llegado dos veces a los 40) y es una de las grandes sensaciones de la temporada NBA. Pelea por el Rookie del Año (con Ben Simmons), su equipo ha ganado 11 partidos seguidos (primer rookie de la historia en liderar a un equipo en anotación en una racha de 11 triunfos) y ayer se convirtió en el nuevo campeón del concurso de mates de la NBA. Es el momento de dar las gracias. En este caso y sin que sirva de precedente, a una lesión. Aquella muñeca rota nos regaló su carrera NBA.