El Girona se luce y gana al Manchester City
Los rojiblancos fueron superiores durante los 90 minutos y se proclaman campeones del Trofeo Costa Brava en lo que fue el estreno de Montilivi. Acaban la pretemporada con muy buenas sensaciones.
El Trofeo Costa Brava fue para el Girona. Los rojiblancos se gustaron ante un Manchester City que decepcionó pese a aparecer en Montilivi con sus estrellas. El tanto de Portu bastó para que los de Machín acaben la pretemporada con unas sensaciones inmejorables.
El Girona ya huele el inicio de Liga y Pablo Machín concienció a su plantilla de tal manera que el Trofeo Costa Brava no fuera un simple amistoso. La alineación que planteó, con el típico 3-5-2, será muy similar a la que reciba el sábado al Atlético y lo cierto es que en la primera mitad fue muy superior al Manchester City. En la primera acción de Portu ya demostró estar enchufado y, en el 14’, puso justicia al fútbol que estaba realizando el conjunto gerundense. Aday aprovechó el hueco que había por la banda de Danilo para centrar al segundo palo donde esperaba un Portu que aprovechó el resbalón de Sané para plantarse ante Claudio Bravo y hacer el 1-0. La ilusión de desató en un Montilivi entregado a la causa y que estaba disfrutando como su equipo pasaba por encima de un City simplón. El equipo de Pep Guardiola estuvo carente de fluidez en el centro del campo y Bernardo Silva y Sterling no aparecían. Sané probó tras una acción individual a Gorka Iraizoz, pero el meta respondió con una gran seguridad.
Borja García se gustó en más de una ocasión en el centro del campo y lanzaba una y otra vez las ofensivas de un Girona que castigaron el 3-5-2 que también presentó el City. Y ya al final de la primera mitad, en el 42’, Stuani retó a Stones en el uno contra uno, se zafó y su disparo cruzado lo despejó Claudio Bravo.
Ya en la segunda mitad, el City apareció con una marcha más y, en el 55’, Sterling pudo empatar pero la defensa de Bernardo fue más rápida y mejor que la definición del punta inglés. Tres minutos más tarde, Machín hizo seis cambios y la entrada de Douglas Luiz y Boulaya dio aire y juego a un Girona que volvía a hacer disfrutar a una afición que se puso a hace la ola. Sobre el césped los rojiblancos se gustaron y Stuani, en el 67’, pudo hacer el 2-0, pero perdonó. No le hizo falta a los rojiblancos porque en los últimos minutos apareció Gorka Iraizoz. En el 89’ ganó en el mano a mano a Bernardo.