Andone (2) y Carles Gil marcaron antes del descanso. Último partido de Quique Setien en un Las Palmas que acabó con diez por expulsión de Hernán. Riazor acabó haciendo la ola.
Paralelamente se disputó otro partido entre los ‘Riazor Blues’ y el resto del estadio, perdido por goleada por los primeros. Cada grito al equipo, a jugadores en concreto, al Consejo o a Tino Fernández era contestado con una sonora pita. La batalla duró hasta el 30’, el minuto anunciado por los ‘Blues’ para abandonar el estadio. Esta vez hubo aplausos de un Riazor que se agradeció quedarse sin su presencia en las gradas demostrando que una cosa son las redes sociales y otra, el senado de los socios en el estadio. Tanto, que la afición acabó haciendo la ola.